Bernarda nos permitió pasar la noche allí, por supuesto, ella después del ritual dijo que podíamos volver cuando quisiéramos. Se vio sorprendida porque todos aparezcamos allí de sorpresa, sin avisarle. Pero intentamos buscar una buena explicación durante un buen rato antes de bajar a hablar con ella.
Dedujimos solos nuestros propios presentes. Irina seguía viviendo en Hills Town pero en casa de Bernarda, no en la mía porque yo aún vivía allí. Nathan y Noel, por alguna extraña razón, vivían juntos en un apartamento de Greenwood. Augusto jamás dejó Hills Town porque siempre creyó que las cosas cambiarían entre él y Renata. Cato, Ulises y Tessa nos enviaron mensajes diciendo que estaban bien, que cada uno apareció en las casas de sus respectivos padres dónde recordaban haber estado en su presente real. Que intentarían llegar a Minnesota lo más rápido que pudieran.
Así que, después de la cena antes de irnos a dormir, estábamos todos en la habitación de Irina. Aún había varias camas y no pude evitar recordar las veces que nos quedamos allí, charlando hasta las cinco de la mañana con Tessa.
—Si revertimos todo, ¿cómo es qué Elías no está aquí? Cambiamos el pasado y el futuro, pero él no está aquí —habló Irina, llamando la atención de todos.
Augusto había estado todo el día durmiendo, así que después de una ducha y un plato de comida caliente, ya se sentía un poco mejor. O al menos eso había dicho, pero se notaba en su rostro que no estaba tan adolorido. Se negó a que lo lleváramos al hospital, así que le dimos una buena dosis de calmantes.
—Eso no tiene sentido —la apoyó Noel, negando con la cabeza mientras se dejaba caer en la cama con su pantalón pijama.
—¿Acaso la muerte es algo que no se puede cambiar con las reglas de la magia a través del tiempo? Ni siquiera recuerdo haber leído nada sobre eso —intervino Nathan, leyendo un libro que encontró en la biblioteca de la sala.
—Yo jamás había leído nada sobre magia, así que estoy peor que ustedes —agregué y vi a mi hermana sonreír por lo bajo.
—¿Qué haremos ahora? —preguntó Augusto—. No pienso quedarme en este presente, es una mierda.
—Es el que elegimos intentando salvar a Elías, genio. No existe otro presente —le explicó Irina negando con la cabeza.
—Tal vez si. En otra realidad alternativa —susurró Nathan mientras pasaba de hoja, inmerso en las páginas de libro.
Irina lo miró mal y Noel revoleó los ojos. Me acomodé en la cama de mi hermana, moviéndome para estar más cómoda para la próxima charla que se aproximaba.
—Primero que nada, debemos esperar que el resto llegue. Cato está en el avión, Tessa igual y Ulises aún está en el aeropuerto. Solo... mañana cuando estemos juntos quizá sepamos que hacer. O al menos, seremos más cabezas para pensar —explicó Noel moviendo las manos sobre su pecho desnudo.
—Esto está mal, hay que volver y revertir todo —habló Nathan, ignorando por completo a su hermano. Noel se encogió de hombros y negó con la cabeza, en una clara mueca de "de igual forma jamás me escuchas".
—No debimos evitar el asesinato, tiene que haber otra solución. Otra forma —lo apoyó Augusto, sentándose en un poco en la cama de Tessa y asentí con la cabeza, estando de acuerdo.
—Bernarda tenía razón. Lo que sucede no se puede cambiar, tenemos que pensar algo distinto —agregó Irina, cruzando las piernas debajo de su vientre.
Nathan abrió la boca para decir algo, pero solo un sonido inentendible salió de allí. Comenzó a pronunciar una palabra pero no la terminó. Lo observé para ver que tenía el ceño fruncido y se detuvo de hablar, como si estuviese pensando si era buena idea decirlo o no.
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Controversia (Saga completa)
FantasíaAlison Hock, arrastrada por su hermano a un pueblo desierto llamado Hills Town, comienza a vivir nuevas experiencias. Tras conocer a los hermanos Clarke, quienes despertarán una intriga en ella, se dispone a conocerlos mas de cerca. En el medio de t...