Parte narrada desde el punto de vista de Yoongi.
Conducía a toda velocidad por la autopista de vuelta a casa. Estaba triste, como cada fin de semana que tenía que dejar a Soobin, pero necesitaba ver a Taehyung y aclarar las cosas con él.
- ¡Ese maldito cerdo de Kihyun! - gritó golpeando el volante con las manos.
- Te advertí de que debías contárselo. - le dijo Namjoon, molesto, al otro lado del teléfono que llevaba puesto en manos libres.
- Lo sé RapMon, no me jodas tú ahora. - protestó él agobiado.
- Te jodes tú solo, hermano y como lo pierdas te vas a arrepentir. - Yoongi apretaba la mandíbula con fuerza, para no echarse a llorar de la rabia.
- No sé para qué me acosté con el idiota ese otra vez. - el moreno suspiró.
- Deberías aprender a manejar tus sentimientos, lo hemos hablado muchas veces. - le dijo con seriedad. - Pienso que Tae te va a entender y va a seguir adelante, te quiere demasiado. Pero le tienes que dar una seguridad que ahora mismo no tiene.
- Jamás lo engañaría, pero en ese momento...
- 'No erais nada y estabas confundido' - repitió como un loro. - Lo sé, hyung, me lo has dicho veinte veces. Pero yo te creo, no es a mí a quien tienes que convencer.
- ¿Y qué le digo? - le preguntó desesperado. - Me dan ganas de estamparme con el coche y no llegar.
- Dile la verdad: que eres gilipollas, pero que estás intentando dejar de serlo por él. - el mayor soltó una irónica carcajada.
- Eres un pésimo amigo, que lo sepas. - Namjoon se echó a reír.
- Te diría que tú eres un pésimo novio, pero ni a eso llegas, payaso. - el rubio bufó molesto y colgó la llamada.
Hacía apenas media hora que había salido de Daegu y sentía como si llevara días dentro del coche. El camino se le estaba haciendo eterno y cuanto más aceleraba, más despacio sentía que iba.
Encendió la radio para ver si escuchando música se entretenía un poco y cuando puso su emisora favorita, una canción demasiado familiar comenzó a sonar.
- Genial, strawberries and cigarettes, lo que me faltaba. - susurró al escuchar la melodía.
Pero no pudo evitar ponerse a cantar. Y gritó y se desahogó mientras sentía cada palabra de la canción. Y se permitió llorar, para limpiar con sus lágrimas toda la rabia que sentía consigo mismo.
No podía perderlo, se negaba a perderlo. Taehyung le había traído felicidad a su vida y aunque sabía que se había equivocado, por suerte aún estaba a tiempo de arreglarlo.
- ¡Vamos a vivir juntos y a tener un puto perro que se llame Yeontan! - gritó secándose con la mano las mejillas empapadas. - ¡Cómo que me llamo Yoongi!
Parte narrada desde el punto de vista de Taehyung.
Esperaba con ansias la llamada del mayor. Lo había avisado un rato antes de que salía de Daegu para volver a casa, pero los minutos parecían no querer pasar.
Tenía ganas de verlo, eso era algo que no podía negar, pero no sabía cómo reaccionaria cuando lo tuviera delante. A veces quería besarlo, otras cruzarle la cara de un bofetón.
- Relájate. - le pidió Hoseok poniendo la mano sobre su pierna, para que dejase de moverla. - No va a llegar hasta dentro de un par de horas y si sigues así te va a dar algo antes.
- Es que no sé qué hacer cuando lo vea, hyung. - el mayor se echó a reír.
- Pues lo que te pida el corazón.
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Mi mejor actuación [TAEGI]
Fiksi PenggemarTaehyung es un estudiante de Arte Dramático al que un día la vida obliga a interpretar el papel más difícil de todos: fingir amistad donde hay amor. '¿Cuándo vas a darte cuenta de que la vida no es un escenario y vas a dejar de actuar? Estás tan ena...