Capítulo 54

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Nota: este capítulo es continuación del anterior y está narrado desde el punto de vista de Yoongi.
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- ¡Vamos bebé, es tarde ya! - le explicó su madre tratando de soltarlo de los brazos de su padre.

- ¡No, no! ¡Papá! ¡Hyungie! - protestaba el pequeño, luchando por aferrarse a él con todas sus fuerzas.

- Podría quedarse a dormir en casa de mi hermana hoy con nosotros. - le sugirió Yoongi. - Quiero decir... si no te parece mal.

- No sé... Es que no os conoce demasiado y puede que por la noche se eche a llorar. - el rubio asintió con tristeza.

- ¡Papá dormir! ¡Hyungie dormir! - gritó el pequeño desesperado.

- ¿Quieres ir a dormir con ellos a casa de la tía Mihee? - le preguntó su madre. El pequeño asintió con la cabeza. - ¿Y me prometes que no vas a llorar y te vas a portar bien? - Soobin volvió a asentir.

- Te juro que te escribo a cada rato y te mando fotos si quieres. - le dijo Yoongi entusiasmado. Sunmi suspiró dándose por vencida.

- Está bien, voy a buscarle un par de ropas y sus cosas entonces. - el rubio asintió con la cabeza.

- Gracias por confiar en mí. - la chica le sonrió con cariño.

- Sé que estará en buenas manos.

...

Caminaba de vuelta a casa de la mano de su hijo, que a su vez sujetaba la mano de Taehyung, completamente emocionado por ir a dormir con ellos.

Se quedó mirándolo a los dos embobado y en su mente, un trozo de la conversación que había tenido días atrás con Namjoon, se repitió.

- ¿Crees que va a ir de la mano conmigo y mi hijo por la calle?

- No des nada por sentado, quizás te llevas una sorpresa con él.

Y una vez más, su amigo tenía razón.

Se sentía realmente feliz, como hacía muchos años que no se sentía. Sabía que nada sería fácil con Taehyung, pero también que los sentimientos eran recíprocos y nadie podría arrebatarle eso.

Adoraba verlo jugar con su hijo, darle cariño, cogerlo en brazos aunque le costara el doble con su escayola.

Adoraba a Taehyung, porque había sido un ángel para él, una luz al final del túnel, una nueva oportunidad.

Y tenía claro que no lo dejaría marchar fácilmente.

Sabía que el chico no iba a dejar a su novia de un día para otro, que aún tenía demasiados miedos y demasiadas dudas para hacerlo. Pero también tenía claro que el día llegaría, tarde o temprano. Y que él estaría ahí, peleando por ello.

No pudo evitar sonreír al pensar en Haneul. Era consciente de que lo que estaban haciendo estaba mal, él había sido la víctima durante muchos años en su relación con Sunmi, pero siempre pensó que Taehyung era demasiado para ella. Y aunque a veces se sentía una pésima persona, después recordaba lo manipuladora y tóxica que Haneul podía llegar a ser y se le pasaba.

- ¡Mirad a quien os traigo! - gritó mientras abría la puerta de la casa de su hermana.

Jessica fue la primera en aparecer por la entrada y cuando vio a su primo, corrió hacia él para cogerlo en brazos. Desde que supo, unas semanas atrás, de la existencia de Soobin, no se había separado de él en casi ningún momento.

Mihee solía quedar por las tardes con Sunmi, ya que vivían muy cerca, para que los primos pasaran el rato juntos. Así que el pequeño sentía adoración por su prima Jessica.

- ¿Te lo deja esta noche? - le preguntó su hermana al verlo con ellos. Yoongi asintió feliz con la cabeza.

- Me vas a tener que ayudar un poco, ya sabes... - respondió avergonzado. Era padre, pero nunca había ejercido como tal y había cosas que no sabía hacer bien.

- Claro, no te preocupes, Ian y yo te ayudaremos en lo que necesites. ¿Te ha dado ropa su mamá?

- Aquí están todas sus cosas. - le dijo entregándole una mochila. Mihee la abrió y observó lo que había.

- Genial, entonces lo primero un baño, que viene pringado de helado. Y luego a ponerse el pijama.

Cogió al bebé de los brazos de su sobrina para llevarlo al baño de arriba, pues en el piso inferior solo había una placa de ducha. Preparó una ropa limpia y un pañal, también su crema hidratante y la colonia de bebé que Sunmi le había puesto.

- Él es mayor ya y se queda bien sentadito, así que si te parece más cómodo puedes bañarte con él. - le explicó su hermana.

- ¿Con él? Qué vergüenza noona... - Mihee se echó a reír.

- Nosotros siempre nos hemos bañado con Jessica. Ellos tienen que ver el cuerpo humano como algo natural, eres su padre. - Yoongi asintió con la cabeza.

- Quizás la próxima vez. No me siento cómodo aún, ya sabes... apenas me conoce. - su hermana le sonrió comprensiva.

- Tenéis toda la vida por delante.

...

Siempre supo que algún día querría ser padre. Aunque la gente no lo creyera, le gustaban los niños y se le daba bastante bien lidiar con ellos. Pero jamás pensó que tener uno suyo le causaría tanta emoción.

Verlo chapotear y jugar con el agua mientras lo bañaba, lo hacía enormemente feliz.

- Yoongi tienes que enjabonarlo, no dejarlo que juegue durante media hora. - le dijo su hermana entre risas.

- Es que es muy gracioso, ¡mira como salpica!

- Verás lo gracioso que te va a parecer dentro de un par de años. - respondió ella. - Vamos, enjabona, el agua se está enfriando.

Por suerte para él, Soobin se mantenía bien en pie y no le resultó tan difícil enjabonarlo. Cuando terminó de bañarlo lo envolvió en una toalla para llevarlo a la habitación.

- ¡Hyungie! ¡Hyungie! - gritó el pequeño dando golpes en la cama.

- ¿Quieres que llame a Taehyung? - Soobin asintió con la cabeza. - Pero sabes que tiene lastimado el brazo, él no va a poder vestirte.

- ¡Hyungie! - repitió él, golpeando el lugar de la cama a su lado con la palma de la mano. Yoongi suspiró.

- Está bien, está bien. ¿Puedes llamarlo noona? - Mihee rodó los ojos y asintió.

- ¡No te olvides de ponerle la crema!

Apenas un par de minutos después de que su hermana saliera, Taehyung apareció por la habitación confundido.

- ¿Qué ocurre? - A Soobin se le iluminó la cara en cuanto lo vio entrar.

- ¡Hyungie!

- Que parece que mi hijo te quiere más a ti que a mí, por lo visto.

Mi mejor actuación [TAEGI]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora