THE PRICE OF MY PRIDE || hopemin

Capitulo diecisiete

Los dos se separaron enseguida al escuchar las voces de los que llegaban.

Jimin se limpiaba un poco la comisura de sus labios, y Hoseok trataba de recuperar su respiración.

El primero en entrar fue Namjoon, Jin se quedó afuera hablando por su celular con su hermana. Y en ese momento llegaron Yoongi y su nuevo amigo Chan. Yoongi no quiso pasar ya era tarde así que sólo dejó al joven arquitecto y se marchó.

—¡Hola! buenas noches chicos. Pensé que ya estarían dormidos— expresó el peligris.

— Buenas noches Namjoon. ¿Y Jin?— habló el pelirrojo

—¿Jin? ¿Está aquí?— preguntó el rubio.

—Si hermanito. Llegó esta mañana—  contestó el peligris mientras se servía una copa de vino.

—Eso ya lo sé— espetó el rubio— lo que quiero decir es que si está aquí, en la mansión— expresó con algo de molestia, caminando hacia el pequeño bar donde se encontraba su hermano.

Hoseok  miraba al rubio con el ceño fruncido pues no le agradaba para nada el tono con el que se estaba expresando de su jefe.

—¡Ah! eso, si así es. Oh, mira aquí vienen— comentó el peligris ignorando la molestia de su hermano.

Hoseok y Jimin voltearon a la entrada. El rubio frunció el ceño al ver al acompañante de Jin.

— ¡Hola! ¡Buenas noches! Pequeño Jimin ¿cómo estás?— saludó el castaño. El rubio sólo rodó los ojos ignorando al mayor.

—Hyung, buenas noches— contestó el pelirrojo a su jefe quien le brindó una sonrisa. Hoseok no pasó por alto que Jimin había ignorado al castaño. Luego se dirigió al más joven—. Que tal Chan, ¿cómo te la pasaste?— preguntó con una sonrisa

—¡Oh! Me fue muy bien, el señor Min es muy divertido— exclamó el joven arquitecto.

—Jimin, te presento a Chan. Es arquitecto al igual que Hoseok y Jin— dijo el peligris.

El rubio miró de soslayo al joven con un poco de desagrado. Y despues dirigió la mirada a su hermano.

—Y supongo, que también se hospedará aquí— dijo con ironía el menor de los Park, mirando a los ojos a su mayor.

—Asi es hermanito. Jin se quedará el fin de semana. Y Chan se hospedará aquí al igual que Hoseok, el tiempo que sea necesario.

—¡Entonces hyung, deberías convertir está mansión en una casa de huéspedes!— espetó el rubio,con bastante ironía, sin darse cuenta que con eso había ofendido a Hoseok—. ¡Es el colmo que hagas lo mismo otra vez! ¡no lo consultaste conmigo! ¡Este lugar ya no es una mansión, ya se está convirtiendo en un hotel de lujo para arquitectos!
— el rubio estaba dando la espalda al pelirrojo. En el momento en el que giró se topó con la mirada seria de Hoseok. Por un momento se le olvidó que él estaba presente—. Hoseok— susurró el rubio.