Capitulo 93 💜

122 10 4
                                    

Salieron de la habitación; Hoseok abrazando por la espalda al rubio rodeando su cintura y éste recargando su cabeza sobre su pecho, iban dándose besitos hasta llegar al comedor

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Salieron de la habitación; Hoseok abrazando por la espalda al rubio rodeando su cintura y éste recargando su cabeza sobre su pecho, iban dándose besitos hasta llegar al comedor.

-¿No te parece que hay demasiado silencio? -preguntó el pelinegro.

-Si, es verdad.

Llegaron a la mesa del comedor, dónde había una nota la cual el arquitecto tomó comenzando a leerla.

-¿Está todo bien, mi ángel?

Hoseok sonríe. -Si, mamá dejó esta nota para avisar que ella y Lisa salieron a hacer algunas diligencias, y Jennie salió con unas amistades.

-Entonces...¿Estamos solos? -preguntó acercándose a su esposo llevando su dedo índice a sus labios con picardía.

El arquitecto lo tomó de su cintura acercándolo más a él.

-Asi es mi príncipe. -respondió besándolo apasionadamente.

El rubio correspondiendo a ese beso se sintió como en las nubes, ahí entre sus brazos, aún y si ya habían echo el amor, la pasión entre ellos están siempre latente.

-Lo dicho, joven Park...es usted tan... insaciable. -musitó el arquitecto entre beso y beso.

-Simplemente...no puedo resistirme a usted arquitecto.

Los besos siguieron, momentos tiernos, apasionados estaban presentes pero fueron interrumpidos justo cuando Hoseok llevaba una de sus manos por debajo de la camisa del rubio. Una voz, casi en un grito hizo que esos labios y lenguas enredadas se apartaran.

-¡Bravo! -exclamó con molestia la joven castaña aplaudiendo. -¡Pero que gran espectáculo!

Jimin sintiéndose triunfante dibujó una sonrisa de lado, al mismo tiempo que limpiaba las comisuras de sus labios con burla para la castaña. La chica obviamente enfureció con ese gesto del rubio, sintiéndose celosa.

Hoseok por su parte frunció su ceño mirando a la chica.

-¡No puedo creerlo, Hoseok! ¿¡Se te olvida en dónde te encuentras!? ¿¡No te importa dar este espectáculo!? ¡deberían seguir encerrados en tu habitación, si van a comportarse de esa manera!

-Basta Jennie, no estábamos haciendo nada malo.

-¿¡Te parece poco, besarse de esa manera!? -la castaña parada frente al arquitecto lo miraba molesta con sus puños cerrados conteniendo todo su coraje.

THE PRICE OF MY PRIDE || hopeminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora