Nunca sabemos lo que nos depara el futuro. Nunca sabemos en qué momento el amor llegará a nuestras vidas, y con ello, el dominio de nuestro corazón.
Park Jimin, el ser más engreído y caprichoso, además de vanidoso, pues sabía perfectamente de su atr...
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-¡¡Pero que te pasa Jennie!! ¡Vístete de inmediato!!
Gritó la mayor mirando a la castaña cuando dibujaba una cínica sonrisa en el rostro
Jennie se envolvió en la sabana para después levantarse sin dejar de sonreír, en ningún momento tomó su ropa, se paró frente a la mujer mayor que estaba furiosa.
Jiwoo la miraba fijamente con el ceño fruncido, sentía que su labio inferior temblaba del coraje que estaba sintiendo en esos momentos.
-¡Dije que te vistieras, Jennie!
-Madrina no te pongas así, no te enojes....después de todo no pasó mucho entre Hoseok y yo...
-Pero...no seas cínica...¡Mírate! ¡Te encuentras desnuda!
La chica se miró ella misma con tal desfachatez que eso enfureció más a la mujer azabache.
-Madrina, no deberías enojarte tanto...Hoseok y yo solo nos dimos caricias...-decía acariciando su propia boca. -...Nos acariciamos, madrina nos besamos...él estaba tan excitado...
Una sonora bofetada se escuchó en esas cuatro paredes. La mayor dejó ir su mano sobre la mejilla contraria.
-¡¡Cállate, no seas cínica!! ¡¡Respétame y respeta esta casa, Jennie!!
Jennie llevando su mano hacia su mejilla golpeada mira con asombro a la mayor.
-¿Por qué me haces esto, madrina? ¿¡Por qué no me apoyas!? -dijo en un grito y otra bofetada se escuchó.
-¡No vuelvas a levantarme la voz! ¡Te vistes pero ya! Después hablo contigo, me vas a escuchar Jennie. -dijo con su voz furiosa para después salir de esa habitación.
Jennie se quedó de pie con lágrimas en los ojos y al mismo tiempo una sonrisa cínica dibujada en su rostro. Se sentía satisfecha por lo que según ella había logrado, separar a esos dos. Pero su último golpe aún estaba por venir.
Por otro lado la señora Jung se dirigió directamente a la habitación de su hijo. Lo encontró sentado en la orilla de la cama, estaba llorando con sus manos cubriendo su rostro.
La mayor sintió que su corazón se estrujaba al ver asi a su hijo, sin embargo no lo iba a justificar. Cerro la puerta y se paró frente a él con sus brazos cruzados y mirándolo severamente.
-¿¡Me quieres explicar que significa todo esto, Jung Hoseok!? ¿¡Cómo pudiste faltarle así a tu esposo!? -preguntó con gran molestia en su voz.
