Nunca sabemos lo que nos depara el futuro. Nunca sabemos en qué momento el amor llegará a nuestras vidas, y con ello, el dominio de nuestro corazón.
Park Jimin, el ser más engreído y caprichoso, además de vanidoso, pues sabía perfectamente de su atr...
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La noche anterior después de que Hoseok y su madre habían hablado sobre esa llamada tan desagradable, Jiwoo se sintió más tranquila, con Hoseok habían acordado en hablar con Lisa sobre ese hombre.
Salieron de la habitación y se dirigieron a la sala dónde permanecían Lisa y Jimin hablando de cosas triviales. Habían pedido cena ya preparada para evitar que la señora Jiwoo cocinara.
Lisa se fue a los brazos de su madre para darle un beso en la mejilla preguntándole si ya se sentía mejor, Jiwoo asintió y le pidió que tomara asiento pues tenía que decirle algo muy importante. Jimin quiso retirarse pues entendía que era cuestión de familia, pero tanto Hoseok como Jiwoo le pidieron que se quedara, después de todo él ya era parte de la familia.
Lisa escuchó con atención todo lo que su madre le contó sobre aquel hombre, al igual que Hoseok también contaba como fue que su madre, sola sin ayuda de nadie los había sacado adelante. Lisa lejos de sentirse mal por esa situación, sintió coraje contra aquel hombre que era su padre. Jiwoo le pidió que no le tuviera ningún rencor, tal y como tantas veces se lo había pedido al pelirrojo, pero la chica obviamente no podía evitar sentir coraje hacia Heatul, ni siquiera lo conocía pero por todo lo que habían pasado su hermano y su madre ya sentía que lo odiaba.
Lisa era de un carácter noble al igual que su hermano pero también al igual que Hoseok su carácter era fuerte, le molestaban las injusticias y ese hombre había sido demasiado ruin y cruel al haberlos abandonado en esa situación, realmente no quería volver a escucharlo ni mucho menos conocerlo.
Hubo algunas lágrimas por parte de todos los que estaban en la sala incluso Jimin había llorado, le dolía saber todo lo que su ángel junto a su madre habían sufrido por culpa de ese canalla. El rubio ya había escuchado esa historia, aquella vez que Hoseok se puso muy mal después de haberse encontrado con el señor Jung, pero volver a escuchar lo mismo en voz de la mujer que iba a ser su suegra había sido realmente lastimoso.
Después de un largo rato en que todos se recuperaron, decidieron sentarse a la mesa para cenar. Hoseok apesar de sentir en esos momentos todavía el coraje por lo que había pasado trataba de sonreír para su familia y para su novio, comenzó a bromear para olvidar el amargo rato, causando sus risas y carcajadas realmente el pelirrojo estaba logrando su cometido.
Después de la cena tanto Hoseok como Jimin ayudaron en la limpieza del comedor, los dos se dedicaron a lavar los platos que había utilizado así como los cubiertos. Mientras tanto la señora Jung y su hija permanecían en la sala platicando sobre la escuela y otras cosas.
Ya más tarde Hoseok y Jimin decidieron ir a descansar, claro cada uno por separado. Lisa se fue a descansar también, y la señora Jung decidió esperar a Jennie que aún no llegaba a casa lo cual era extraño. Después de media hora finalmente Jennie llegó, encontrándose con su madrina sentada en el sofá de la sala haciendo cuentas de la casa.
