Francia X Lectora Palabras de amor

3.3K 193 9
                                    

Él es mujeriego, pervertido, ruidoso, molesto, inútil en muchas ocasiones, pero... También puede ser amable, amigable, interesante, honesto, divertido, y algo que nunca esperaste. Podía ser extremadamente fiel a ti.
Lo conociste cuando viajaste a París por cumplir 25 años, fue tal vez el destino quién decidió jugar un rato contigo haciendo que te perdieras y conocieras a un tipo extremadamente raro, él cuál parecía ser un bufón en algunos casos, más resulto todo lo contrario, quitando su lado pervertido y coqueto a más no poder, Francia podía ser extremadamente profundo, y de alguna manera, poco a poco, comenzaste a amarlo por la simple razón de ser él.
Miraste por la ventana de tu cuarto, el sol acariciaba suavemente tu vientre donde ahora habitaba el fruto de tu amor por ese extravagante hombre.
-Buenos días-Saludo dándote un beso en los labios, te abrazo a él.
-... Hola bobito...-Saludaste de manera cariñosa.
-Me haces bullying desde temprano???-Pregunto el francés con un tono de voz lastimero, muy dramático en tu opinión. Te recargaste en su pecho y sonreíste como boba.
-... Antes me habría reído a carcajadas si me dijeran que iba a terminar conociendo a una persona tan extravagante que terminaría siendo mi esposo y el padre de mi niña...-Dijiste mientras admirabas la belleza del amanecer.
-... Antes no habría creído que tendría una hija con una extranjera que me golpeaba cada cinco minutos...-Respondió Francia en burla, sonreíste recordando las múltiples veces que le habías dado una paliza cuando se trataba de sobrepasar contigo o cuando le coqueteaba a tus amigas.
-... Me pregunto si Liz estará en estos momentos abrazada a Prusia, o si Janet estará teniendo alguna paella con España y Romano... Deberíamos ir a visitarles un día de estos, quiero que conozcan a Jane antes de que nazca.-Dijiste mientras pasabas suavemente tu mano por tu vientre ya un poco redondeado, tu embarazo ya tenía cuatro meses y todo era más que perfecto.
-También sería una buena idea ir a visitar a Mago e Inglaterra, Elizabeth también merece conocer a su primita.-Contesto suavemente el francés.
-Nunca espere que Mago se fuera a casar con el cejas, ni mucho menos que ahora tengan una niña de cinco años.-Miraste al francés el cual se limitó a encojerse de hombros.
-Las palabras de amor y las acciones atacan a todos y cada uno de nosotros, pero, al final, sólo algunos sin capaces de escribir y sobre escribir su historia en el destino del amor.-Su voz sonaba tranquila, Francia entrelazó sus manos en tu vientre mientras seguía abrazándote.
-... Palabras de amor... Recuerdo que eso mismo me dijiste cuando nos conocimos, estoy feliz de que te haya encontrado.-Los labios de Francia se posaron en tu mejilla.
-Vamos, hay que desayunar.-Dijo para tomarte de la mano y abrir la puerta de su habitación.
Agradeciste y saliste por la puerta siendo escoltado por tu amor, por tu esposo y por el padre de tu pequeña hija.

•Oneshots Hetalia•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora