Alemania X Lectora

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Las canciones tienden a tener una historia, por lo cual es normal llegar a comprender los sentimientos de esta. Al igual que los sueños, las canciones son tristes o felices, tal vez hablen de amor o hasta de odio, algunas seguramente expresaban ironía... Y eso era algo que te gustaba mucho, contando con ser la capital de tu país, disfrutabas como nunca poder oír todo tipo de canciones de los diferentes años. Pero, desde que habías descubierto que estabas enamorada de Alemania, no hacías más que sentirte un poco mal y eso se reflejaba en el estilo de música que escuchabas. Tus amigos parecían haber notado eso, pero, no eran capaces de saber que te pasaba. Así que decidieron hacer una fiesta en la alberca para tratar de subirte los ánimos. Llegaste temprano, un minuto después de la hora citada, esperando ser la primera. Pero, para tu poco sorpresa, Alemania, alias tu mejor amigo desde hace tres años, ya estaba en la alberca.
Jugaba con un pequeño avión de papel, cosa que te enterneció, ese país podía llegar a ser tan lindo...
Te sentaste a su lado después de saludar, Alemania dejo a un lado el avión para mirarte a los ojos.
-... Pasa algo???-Preguntaste tratando de no sonar ni cortante, ni nerviosa.
-... Has estado rara estas últimas semanas. Y quería saber que pasaba...-Te respondió para arrojar su avión, el cual aterrizo al otro lado de la alberca.
-... Lo siento, los he preocupado mucho... Es sólo que estoy pasando por una pequeña etapa femenina... Es todo.-Respondiste diciendo la verdad a medias.
-... Bueno... Quieres meterte a nadar en lo que llegan los demás???-Te pregunto el dormido alemán, asentiste con la cabeza. Dispuesta a dejar a un lado la triste realidad de que vivías un amor unilateral. Pero, antes de meterte fuiste por el avión de papel, este era bastante sencillo, pero, como lo había hecho el alemán, los dobleces eran perfectos.
Lo lanzaste en dirección a Alemania, el avión de papel aterrizo a sus pies.
-Un gran aterrizaje, teniente Beilschmidt.-Comentaste alegre, el alemán te miro en silencio, para luego mostrar una casi imperceptible sonrisa. Te acercaste a la orilla de la alberca para adentraste en ella, pero, en eso un suave viento paso. Y con eso, una hoja cayo dentro del agua y se quedo flotando sobre la superficie.
-... Por qué no se hunde???-Preguntaste curiosa.
-Por la superficie del agua.-Te respondió el alemán para acercarse a tu lado.
-... No comprendo.-Dijiste haciendo un pequeño puchero.
-Bueno, en la superficie del agua hay como una delgada capa de protección, como si fuera algún tipo de pared. Por así decirlo. Cuando el objeto que cae al agua es muy liviano o los bordes no son toscos, la superficie se mantiene intacta y el objeto no se hunde.-Te explico el país, sus orbes azules se mantuvieron viéndote todo el tiempo. Sonreíste al captar toda la información que te habían proporcionado.
-... Es bueno que sonrías...-Comento el rubio, quién tenía una suave mueca de alivio en su rostro.
-Supongo.-Respondiste ya más alegre.
No volverías a deprimente por tus sentimientos, tenías que continuar viviendo el presente.
-... Oye Alemania...-Llamaste a tu mejor amigo, en cuanto este volteó le sacaste infantilmente la lengua. Pocos segundos después, habías brincado a la alberca, mojando de paso a Ludwig. Sonreíste burlona en cuanto viste que tu plan si se había cumplido. Lo que no esperabas era ver que Alemania entraba civilizadamente al agua, para después atraparte entre sus brazos. Una acción típica entre ustedes causada por varios de tus intentos de huida al lado de Feliciano. Pero, esta vez, no te sermoneo sobre nada, simplemente te beso. Miles de canciones románticas pasaron por tu cabeza, más decidiste ignorarlas y dedicarte a devolverle el beso al chico. Ninguna canción podía hacerte sentir tan amada en esos momento como Alemania te hacia sentir. Al separarse ambos sonrieron algo avergonzados, pero, felices.
Después sólo se pusieron a nadar un poco en los que llegaban los chicos, quienes no tardaron en aparecer después de algunos minutos. Y desde ahí, todo comenzó a mejorar a su debido tiempo, desde tu relación con Alemania hasta el tipo de canciones que escuchabas.

•Oneshots Hetalia•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora