•Oneshots Hetalia•

2p!Japón x Lectora True feelings

-Te voy a enamorar-
-No lo creo-
-Ya lo veremos-
-No seré tu juguete-
-Tomare las medidas necesarias, nena-
Y así, señoras y señores, niños y niñas, habías conocido a aquel maldito playboy.
Desde qué ese japonés se había entrometido en tu vida, ya nada era lo mismo, sabias que estabas perdiendo, aceptaste fácilmente que te gustaba aquel mujeriego, pero, debido a que conocías perfectamente su naturaleza infiel, decidiste ocultar perfectamente tus sentimientos. Últimamente habías visto que un grupo de unos seis chicos parecían discutir mucho con el japonés.
Estabas preocupada por él, aún si no lo mostrabas, eras una excelente actriz.
-Deberías de preocuparte más por este bombón que tienes de pretendiente, nena-Miraste al japonés con cara de duda.
-... Si tu eres un bombón este mundo está podrido...-Respondiste para comenzar a tomar tu jugo de (tsf).
-.... Últimamente me gane un lío...-Tus ojos (tco) miraron al chico.
-No me sorprende viniendo de ti. Ahora qué hiciste??? Seguramente te metiste con la novia de alguno...-Comentaste honestamente.
-... Algo así, las chicas normalmente no resisten mis encantos...-Respondió este mientras miraba a unas chicas a la lejanía, tenías ganas de golpearlo hasta romperle algunos huesos, más te tranquilizaste y terminaste levantandote de tu asiento.
-... Bueno, pues espero que esas chicas te ayuden a salirte del rollo que te metiste por idiota...-Comentaste enojada, caminaste sin prestar atención al japonés.
Ya habían pasado tres días desde aquello, te dirigías tranquilamente a casa cuando perdiste el conocimiento por un fuerte golpe que te dieron. Despertaste en la azotea de algún edificio, no te asustaste, sabias perfectamente que estaba pasando.
-Vaya ya despertó.-Comento uno de los seis chicos, todos te voltearon a ver, traían en las manos algunas armas blancas. Tus muñecas estaban amarradas con una soga gruesa por detrás de la espalda.
-Eres (tn), verdad???-Cuestiono otro.
-... Adivinare, me secuestraron para hacerme daño, me usan de rehén para atraer a Japón, cuando llegue lo emboscaran y le darán una paliza, verdad???-Cuestionaste sin una pizca de nervios en tu voz.
-Vaya además de linda, eres lista.-Se burlo otro de los seis, suspiraste cansada.
-Par de tontos-Al decir aquello un chico del grupo te soltó un golpe en la mejilla, retrocediste por el choque. No soltaste ni un sólo sonido de dolor.
-... Ok, pensaba irme de aquí sin violencia, pero, ustedes lo pidieron...-Murmuraste suavemente, justo en ese momento se abrió la puerta dando a conocer al japonés, antes de que él se acercara te pusiste delante de él.
-Esta es mi puta lucha.-Zafaste como si nada el nudo que apretaba tus muñecas, y tronaste tus nudillos.
Medio minuto después los seis chicos suplicaban por piedad, incluso se hallaban arrodillados rogando por tu perdón.
-Malditas escorias, tienen suerte que no este enojada.-Comentaste dándoles la espalda, el japonés te miraba un tanto nervioso.
-... Esperaba ser quién te rescatara...-Enojada le disté un puñetazo en el hombro.
-Deja de coquetear con medio mundo de mujeres, lastimas a las personas, es normal que se quieran vengar!!! Y no soy la damisela en peligro, no necesito que un idiota me rescate!!!-Comentaste irritada, comenzando a caminar dejando atrás a la bola de chicos.
Ya te encontrabas en la calle cuando su mano sujetó la tuya.
-Sino coqueteo con mujeres no tendré otra manera de capturar tu atención!!!-Dijo el japonés con un tono un tanto desesperado comparado con su tono de voz natural.
Tu cara se tiñó de rojo ante aquello.
-Qué dices???!!! Creo que a ti te golpearon más fuerte que a mi!!!-Comentaste nerviosa, el japonés te miro serio.
-Nadie me golpeó-Aclaro.
-... Entonces te drogaron la comida o algo... -Te excusaste, pero, sólo lograste ver una liguera sonrisa en su rostro.
-... Basta... No quiero ser parte de tus juguetes, ya te lo habías dicho y te lo volveré a decir...-Tu mano aún era sujetada por la de él.
-... Yo no te quiero de juguete... Ya no...-El japonés te acercó a él para darte un beso en los labios, eso fue suficiente para que comenzarás a temblar un poco.
-... Qué... Qué!!!???....-Ya no podías ocultarlo, sabias que Japón había visto tu sonrojo y había escuchado tus nerviosos titubeos.
-... Prometo que serás la única... (Tn)... Tu eres única para mi...-Comento el chico de ojos juguetones.
-... Esos son tus verdaderos sentimientos???...-Preguntaste atemorizada. Sus brazos te rodearon y te acercaron aún más a él.
-... Tenía miedo de perderte... Salí corriendo de la reunión de países al ver que no respondiste mis llamadas.-Comento el chico de cabellos oscuros, fue en ese momento que notaste su uniforme militar.
-... Luces como un príncipe oriental...-Murmuraste con una pequeña sonrisa en los labios.
-... Tu príncipe oriental, mi peligrosa guerrera...-Sus palabras hacían eco en tu cabeza.
-... Te quiero, idiota...-Dijiste avergonzada.
-... También te quiero... (Tn)...-Contesto este para después besarte con el verdadero sentimiento corriendo por el cuerpo de ambos, un amor verdadero un tanto distorsionado, pero, amor al final de cuentas.