Sweet Devil!America X Reader

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No eras una humana que pudiera ser considerada común. Contabas con un asombroso, pero, algo peligroso, don. Podías ver demonios, ángeles y fantasmas en genera. Gracias a esto, los habías conocido, dos demonios algo cuerdos a decir verdad. El primero, un demonio de nacionalidad gringa, quién adoraba molestarte y hacerte bromas casi todo el tiempo. La segunda, una de nacionalidad mexicana. Quién era algo peculiar, parecía más un ángel disfrazado de demonio. Alfred y Nita se habían entrometido en tu vida cuando se dieron cuenta que eras capaz de verlos. Alfred para hacerte sus travesuras, Nita, en cambio, para poder tener a alguien con quién charlar.
-Estoy segura!!! Aquel humano cejón puede verme!!!-Comento Nita mientras volaba a tu lado.
-Estas completamente segura???-Preguntaste al acostar tu cansado cuerpo en la cama. Cuando tu cabeza tocó la "almohada" no pudiste evitar ponerte tensa, muy tensa.
-Hola, (tn).-Susurró Alfred a tu oído. Su brazo libre atrapó tu cintura, acercándose peligrosamente a tu cuerpo. El color no tardó nada en inundar tus mejillas.
-Alfred, vas a matar a (tn)!!!-Exclamó la diablesa de cabellos castaños, pequeños cuernos no muy notorios, los cuales te recordaban a Lucy Nyu, parecían unas orejitas de gatito.
Tu cara estaba levemente pegada al pecho del demonio gringo, su colonia se adentraba en tus fosas nasales, te encantaba, aún si lo negabas. Escuchaste unas pequeñas risas maliciosas por parte de tu captor.
-Ella ya se muere por mi.-Comentó burlón, tenía razón, ya te morías por él, porque lo amabas, por más creído que luego se portará. Tomaste impulso, alejandote del diablo aquel. Caíste de la cama, pero, te levantaste ignorando el dolor de tu espalda. Seguramente te la habías raspado con aquella caída.
-...Estúpido creído...-Murmuraste entre molesta y herida. Te sentías mal de que siempre hiciera burla de tus sentimientos.
-Ahora si la amolaste, gringo.-Comentó Nita para salir contigo de la habitación. Sabias que él no te seguiría, siempre era así. Ya eran las 8:30 pm cuando llegaste al lugar donde los conociste, de alguna manera tus pies te había llevado a un pequeño prado desolado.
-... (Tn)...-Te llamo la mexicana, al voltear a verla, encontraste a Nita, sus alas parecían plateadas por el reflejo de la luna, realmente parecía un ángel. Te sentaste en el pasto frío, sufriendo así un pequeño escalofrío.
-... Por qué es así, Nita??? No lo comprendo...-Preguntaste soltando un suspiro derrotado. Ya había pasado un buen tiempo desde que te habías declarado a aquel demonio, y este no había hecho más que ignorar ese hecho.
-... Bueno... Alfred es algo complicado...-Explico Nita al desaparecer sus alas y sentarse a tu lado.
-... Bastante...-Completaste para después mirar al cielo.
Hubo un rato de silencio, hasta que decidiste romperlo.
-... Con la luz de la luna parecías un ángel...-Comentaste distraída.
-De verdad???-Pregunto soltando una sonrisa Nita. Asentiste con la cabeza, en eso, una ráfaga de viento hizo aparición, dejando conocer al demonio que te había robado los suspiros.
-... Nita, quiero hablar con (tn)...-Hablo demandante, la pobre ni pudo responder cuando el americano te cargo en sus brazos y salió volando a gran velocidad. Cerraste los ojos para que el viento no los lastimara. Al abrirlos estabas en tu habitación.
-... Qué quieres???-Preguntaste mientras tratabas de soltarte de su agarre.
-...-Alfred no dijo nada, sólo te volteó de espaldas a él y levantó la playera que traías hasta quitarla.
-Qué haces!!!???-Preguntaste tratando de tapar tu cuerpo, te sentías avergonzada y furiosa. Más no te volteaste para no enseñarle más.
-... Quédate quieta....-Te ordeno calmado, a los pocos segundos sentiste algo húmedo, semi líquido. Recorrió varias partes de tu espalda, sus dedos procuraban no tocarte, sólo el ungüento tocaba tu piel.
-... Lo siento...-Se disculpó para luego entregarte tu playera.
-...-No dijiste nada, sólo te pusiste la playera.
Alfred te miro seriamente.
Ambos se quedaron en silencio, más, una lágrima resbalo de la nada por tu mejilla.
-No me hagas esto...-Murmuraste entrecortada. Al voltear a verlo lo primero que hiciste fue darle algunos puñetazos débiles en el pecho.
-... Si no te interesó para otra cosa más que como blanco para tus bromas, dime eso ya de una vez... Porque me lastimas... Y eso duele más que cualquier otra herida física...-Explicaste dejando que tus lágrimas cayeran sin parar. En eso, sólo sentiste como los labios de Alfred se cerraban sobre los tuyos, eran cálidos, muy cálidos. Para cuando te disté cuenta, tus labios seguían un juego de roces tímidos al igual que los del demonio. La falta de oxígeno los obligo a separarse, ambos con respiraciones agitadas.
-... No bromeo con esto... No quería herirte, es difícil para un demonio aceptar que a pesar de ser lo que es, todavía tiene sentimientos humanos...-Explico mientras entrelazaba sus dedos con los tuyos. Enterraste tímidamente tu cara en su pecho....
-Nita!!!!-Exclamaste recordando que la habían dejado sola.
-... Seguramente fue a ver al británico ese que puede verla....-Dijo para acostarte en la cama.
-... Qué....????!!!-Preguntaste sintiendo que morirías de vergüenza ante su acción. Más, el demonio se acostó a tu lado, abrazándote.
-Querías que hiciera algo más???-Pregunto divertido, negaste frenéticamente con la cabeza, tratando de tragarte tu vergüenza.
-... Hoy no, Nita no tarda en regresar y no queremos ser interrumpidos.-Dijo para esconder su rostro en la abertura de tu cuello y tu hombro. Te dedicaste a tratar de calmar tu corazón desbocado, querías arrojar lejos a aquel demonio perverso, pero, no querías tenerlo lejos. Vaya controversia. Sonreíste para soltar un pequeño suspiro, no tardaste en quedarte dormida en los brazos de Alfred, ni siquiera Morfeo podría haber hecho un mejor trabajo....

*•*•*
Holiwis, pequeñas criaturitas de Hima-Daddy!!!
Las he extrañado!!! Espero se encuentren bien, nos vemos en el siguiente oneshot!!!
<3 Ciao <3

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