15: Necedad.

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Los caminos que llevan a el interior de el bosque fueron diseñados para que la gente de vueltas por las orillas de este sin llegar realmente a el corazón de el bosque donde el misterio y la magia toman forma física.

A Yibo no le cuesta mucho llegar a donde necesita ya que atraviesa las laderas y montés para llegar a prisa a la aldea de los licantropos, donde su aroma hace que la gente llegué a su presencia, después de todo el es el nuevo jefe.

-- ¿jefe wang? -- Yunbin está preocupado ya que solo hace media hora se despidieron.

-- tenemos a una persona que tiene cuatro días perdido. -- dice Yibo tras convertirse en humano de nuevo para después trazar el mapa sobre la tierra. -- ahora hay tres personas más buscándolo, irán por este lugar, y seguro perderán el auto en la ciénaga. --explica marcando los puntos con rocas.

-- esos humanos. Deberíamos dejarlos. -- uno de los ancianos dice para dar la vuelta he ir a su cabaña.

-- uno de ellos es mi compañero.-- Yibo súplica.

-- los Benandati no tienen compañero. -- el anciano se da la vuelta y lo mira fijamente.

-- yo ya tenía a mi compañero antes de ser lo que soy.

Yibo comienza a sentir como las palmas de varios licantropos se posan ligeramente en su espalda, señal de que la manada lo está respaldando.

-- muy bien quiero cuatro grupos.-- Yunbin comienza a organizarse. -- uno recorrerá el camino que las personas dicen que recorrieron. Otro hará guardia en el límite de el bosque viejo, no quiero que los come carne hagan de las suyas. Otro subirá a la montaña para ver si el primero ya llegó. Y  tú y yo barremos el resto de la zona.

Yunbin siempre fue bueno dirigiendo a la manada y simplemente Yibo no comprendía por qué ZiTeng no lo dejo cargo ya que parecía estar haciendo un exelente equipo.

-- otra cosa. -- Yibo habla a la manada. -- mi compañero lleva un tulpa, es importante que no se sienta amenazado.

Ahora que sabía lo que era, y peor sabía de lo que era capaz no quería que nadie saliera lastimado.
Una vez que el trabajo estubo distribuido cada uno se fue a sus labores. Yibo se convirtió en lobo y corrió tras Yunbin hacia la montaña lo primero que revisarían es si llego a la montaña y de hay irían hacia atrás.

Era una suerte que este lugar estubiera lo suficientemente lejos de todo ya que de otro modo este par de lobos jaspeado y café serían vistos de manera extraña subiendo por la ladera más peligrosa de la montaña.

-- ¡puedo oler el rastro!-- Yunbin confirma mientras comienza a subir en su forma humana el último tramo.

-- si, talvez está cerca. -- Yibo simplemente lo sigue.

Es obvio que el último tramo no podrán subirlo como lobos o podrían caer al precipicio.

-- ¡hay una cueva más adelante!-- Yunbin le muestra un lugar unos metros arriba.

Ambos comienzan a subir con la esperanza de encontrarlo en ese lugar, a Yibo realmente le resultaba extraño que de pronto subiera como escalar una montaña si ningún tipo de protección.
Pero ya que nada en la vida era normal últimamente, no le daba importancia. Una ves que estubieron sobre la base de la cueva Yibo pudo respirar ya que el temor de caer lo tenía muy nervioso.

-- ¡Hola! -- grito ha el interior.

Todo estaba oscuro pero había marcas de pisadas recientes así que al parecer Zou Cheng estaba en este lugar. Ambos lobos con forma humana entraron en el lugar con sus reservas.

-- ¡Hola! -- Yunbin volvió a gritar.

-- oouuggg.... -- se escuchó desde el fondo.

Ambos se apresuraron a entrar, y es donde lo encontraron.
Zou Cheng estaba en el piso con una pierna rota he incluso estaba negra, era claro que la perdería.

BenandatiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora