Quinze

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Andrea quería viajar en la ambulancia con Len, para proporcionarle comodidad y apoyo moral. Pero estaba su Jeep, y la sola idea de dejarlo estacionado en el hospital parte de la tarde y toda la noche, no le parecía un agradable pensamiento.

Desde el accidente había evitado pensar en su Mercedez, y aunque sabía que el mecánico contratado por su primero, había empezado con las reparaciones, aún le era difícil...
Alejó cualquier pensamiento de aquella noche de su mente.

«Piensa en flores y mariposas». Se repitió internamente.

Andrea tenía en su posesión, tres autos. Su Jeep, su Mercedez y un escarabajo. El Herbie lo había heredado de su abuelo. Era una reliquia, a la cual le guardaba mucho aprecio y estima. Más allá de que fuera un auto clásico, para Andrea tenía un profundo significado, que nadie además de ella entendía.

Eso la dejó sin ningún vehículo viable para transitar las calles de la capital. Y no estaba muy dispuesta a tentar su suerte. Con mucho pesar y reticencia decidió permitir viajar a Len sola en la ambulancia mientras ella los seguiría por detrás.

-¿Vendrás? - preguntó Len antes de que la subieran a la ambulancia.

-Te seguiré en todo momento en el auto.

-Esta bien - respondía algo desanimada. Tenía la esperanza que Andrea sujetara su mano en el camino.

Andrea sintiendo que la estaba traicionando. Se acercó a Len y le dio un leve beso en la frente.

-Te prometo que siempre estaré contigo.

Subieron con extremo cuidado a Helene, evitando que las ruedas de la camilla golpearan la rampa de la ambulancia. La sujetaron al suelo, para hacer el viaje más cómodo. Cuando todo estuvo en su lugar, Len observó como las puertas eran cerradas.

Antes de partir la enfermera la hizo llenar algunos papeles con respecto al alta que estaba procediendo en ese momento.

-¿Esto es todo? -preguntó a la enfermera mientras firmaba. - No habrá ningún tipo de recargo adicional después. ¿verdad?

-Correcto, con esto queda solventada cualquier inconveniente. Solo necesitamos que dejé constancia con el nombre del paciente y la persona que la acompaña.

-Okey

Mientras Andrea hablaba con la enfermera de la recepción. Melissa, Velásquez y Rebecca entraban al hospital.

Según la información que había obtenido Melissa, Helene debería estar en ese hospital, seguramente registrada con otro nombre o simplemente como «Persona desconocida». Por la delicada situación, Melissa pensaba que Len se encontraba en cuidados intensivos.

-Me gusta que vinieras con tu uniforme. - Había comentado Velásquez mientras salían de la casa de Beck.

Había sido difícil convencer a Beck de salir de su letargo. La depresión la estaba matando lentamente.

-Gracias. - Dijo Melissa un poco avergonzada. Mientras encendía el auto y esperaba que todos abordaran.

-Pierdes el tiempo Mauricio, esta chica ya tiene quien la espera en casa. - Dijo Beck malhumorada, algo común en los últimos días.

-¿Es en serio? No lo sabía. - mostrándose admirado por la nueva información.

Melissa miró con reproche Beck desde el espejo del retrovisor del auto. Pensó entonces que tan cierto era lo que decía su amiga. No era exactamente que la esperaban en casa, pero si había cierto tipo de complicidad en sus interacciones.

IncertidumbreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora