Mi cálico

2. Una noche sin luna

Jefe!! Atropellamos a un Alfa!!!

Omar aún aturdido por el vino y este repentino evento bajó del automóvil vio la delgada figura masculina que luchaba por levantarse y no lo conseguía.

Se quedó perdido por un momento y olfateo el aire, el aroma a algodón y toques florales inundó sus fosas nasales y pudo sentir también el aroma agrio cítrico denotando terror y dolor.

Jefe! Quizás sea una trampa decía Nico sin bajar el arma apuntando al chico desnudo.

Es un Omega! Y corrió al lado del joven que en cuanto vio con sus ojos turbios por la sangre y el llanto a los hombres acercarse se arrastró hacia el bosque.

El chico chillo al sentirse acorralado y las lágrimas brotaban a mares, el dolor en su cuerpo y el terror de sentirse atrapado nuevamente inyectaron adrenalina que lo hizo poder levantarse e intentar escapar rodando entre la hierba.

Kai, al ver la reacción del chico sintió que algo iba mal, parecía que el chico huía de algo o alguien, recordó los casos de omegas que eran utilizados por tratantes de blancas.

El perfil del chico coincidía, tanto temor y el escucharlo decir no me hagas daño.

Por lo que dejó escapar feromonas para tranquilizar al chico.

No por favor! No .. no me .. lastimes.. seré bueno.. ya no ... Puedes... Puedes matarme..
Puedes... Matarme repetía el pequeño chico entre sollozos y una mirada perdida.

Omar Weckman también soltó feromonas para tranquilizar al joven Omega el cuál fue perdiendo fuerza y se encogió en su lugar solo se escuchaban sus sollozos.

Se acercó y le dijo tranquilo no te haré daño,
Tranquilo estás seguro, nadie te lastimará.

La luna, cof cof cof , no veo la luna, yo cof cof cof debo ir, ya debo ir, mi mamá cof cof cof

El estado del chico era lamentable ni siquiera se explicaban que aún siguiera vivo, el golpe a 80 km por hora impactando su cuerpo contra el cristal del auto era para morir en el acto.

Dime el nombre de tu madre la buscaré, decía Omar, mientras su asistente le pasaba el saco para cubrir el cuerpo desnudo del chico, Adrien rápidamente saco su móvil para localizar a la madre del chico.

Hey! Pequeño dime cómo se llama tu madre...
La luna, quiero la luna sollozaba no puedo irme si no hay luna cof,cof,cof

Tu mamá la buscaré, vamos no cierres los ojos,dime
Mamá snif, snif, mi mamá, lágrimas escurrían por sus mejillas, mi mami está con la madre luna allá me está esperando, quiero la luna
Tu la ves?
Si pequeño la veo, mintió Omar mirando el cielo obscuro ausente, es enorme y grande quieres pedirle algo?

Si.

En medio de la carretera en una noche sin luna un Omega agonizante pedía un deseo.