Habla Aitana
Fuimos al banco y me dieron el crédito. La verdad es que estaba un poco triste por todo. Me alegraba mucho porque a Lucía las cosas le estaban yendo genial pero sentía que mi proyecto, que era mi sueño y lo que más ilusión me hacía, no lo estaba compartiendo conmigo. Me había mencionado lo de ser mi socia en la clínica pero como no había vuelto a sacar el tema ni decirme nada... yo no quería tener que pedirle dinero, bastante que le había pedido su ayuda para que me avalara, cosa que le agradecía.
Últimamente la notaba bastante distraída, muy pendiente del móvil o estudiando. Yo trabajaba mucho porque tenía que ahorrar el máximo posible pero sentía que ahora mismo no teníamos ese feeling especial que había antes, y me dolía mucho porque no sabía qué hacer.
Apenas me preguntaba por mi proyecto de la clínica, sinceramente no se preocupaba. Yo sí me preocupaba por su trabajo, le preguntaba por la gira, le decía que me explicara cosas y no sabéis cómo le brillaban los ojos de ilusión cuando lo hacía. Al menos verla así de ilusionada me sacaba una sonrisa.Intenté estar bien y que Lucía no me notara triste porque se tenía que ir. Aquel día llegó y la acompañé al aeropuerto. La podía notar muy nerviosa.
A- avísame cuando llegues a Kiev vale?
L- sí...Me abrazó.
A- todo irá bien, relájate, confío en ti y sé que lo vas a hacer genial
L- ojalá confiara tanto en mí como tú...
A- pues hazlo, porque ya verás que tengo razón :)Me dio un beso.
L- Gracias... en cuanto llegue te aviso
A- te voy a echar de menos...
L- y yo... pero hablaremos vale?
A-...ya...No soné tan convincente como quería porque algo de mí sabía que no íbamos a hablar mucho porque Lucía estaría ocupada o disfrutando de su momento.
L-..estás bien..?
Intenté recomponerme por dentro.
A- sí sí, perdona :)
Anunciaron la última llamada de su vuelo.
L-..he de irme
A-..sí...La abracé. Le di un abrazo que para mí fue totalmente de despedida.
A- disfruta de tu momento vale? Y confía en ti por favor
L- sí... gracias... te quiero 💋
A- y yo a ti 💋Se fue. Una tristeza se apoderó de mí. Me fui para casa a coger mis cosas y para el trabajo.