†105†

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Disfrutamos de una buena comida con el mejor servicio de todos: Dobby, el elfo libre.

Cuando terminamos, Draco de acerca a mí y le da a Dobby cinco galeones para que se marche.

- Así me gusta -le digo-. Te portaste muy mal con él cuando estaba a tu cargo.

Draco pone los ojos en blanco y se viene directamente a mi cuello. Le da un pequeño mordisco.

- Siento decirte... -susurra-... que es todo por hoy. Cuando nos casemos, será más y mejor. Por eso me lo reservo para ese día.

Sonrío y le abrazo.

- Ha estado genial -le susurro al oído.

Llegamos a casa y me encuentro con un panorama... RARO. Frunzo el entrecejo y, seguida de Draco, voy directa a la bruja que hay junto a George y Julia, esta última llorando de la emoción.

Toco el hombro de la bruja y cuando se gira doy un salto del susto:

- ¡ANGELINA JOLIE!

- ¿Tan fea soy? -bromea dedicándome una impecable sonrisa. Julia le sigue la risa.

Me sonrojo.

- Para nada. ¿ Qué... Qué hace usted aquí?

- Oh, ¡por favor! No me llames de usted, ¡me hace sentir vieja! -replica la famosa con elegancia.

Miro a mi prima y a George y veo que están cuchicheando algo. Me acerco a ellos.

- No es que me moleste ni nada, pero... ¿qué coño hace una famosa en mi casa? ¿En qué lío os habéis metido?

- ¡No nos hemos metido en ningún lío! -replican ambos a la vez.

Pongo los ojos en blanco.

- ¡ANGELINA JOLIE! -exclama Eddie entrando por la cocina. Mierda: se acabó la normalidad-. Me la pones muy dura, nena.

- ¡Por Merlín! ¡Qué vulgaridad! -replica Julia poniendo una mueca de asco.

Angelina se ríe.

- No importa. Estoy acostumbrada a cosas peores...

- Pero no tienes por qué soportar al idiota de mi hermano si no quieres -le digo, y miro a mi hermano mientras lo fulmino mentalmente.

- Está bien -suspira Ed-. Lo siento -gruñe.

Angelina suelta una carcajada.

- En el fondo es como un mono recién nacido.

- ¡Oye! -replica Eddie-. ¡Que seas famosa no te da el derecho a insultarme!

- No te insulto. Con elegancia, nombro a los de tu especie -y le guiña un ojo.

- ¡Repite eso! -chilla Eddie imitando a un niño pequeño y remangándose.

- ¡Edward Samuel! -le reprendo.

Eddie sale de la cocina echando humo y desaparece. Cuando se ha ido, todos nos echamos a reír.

- Tu hermano es muy gracioso -comenta Angelina secándose las lágrimas de los ojos.

- Tiene su puntillo -digo mientras me encojo de hombros.

- Está mejor cuando duerme -susurra Draco, pero le escucho y le dedico una de mis miradas que echan veneno.

Él se acerca y me da un beso. Me abraza por detrás y me dice que me quiere.

¿Quién se puede enfadar con él?

- ¿Cómo habéis conseguido contactar con Angelina? -le pregunto a los chicos.

- Es una vieja amiga de mi padre -dice George.

- Prima, ¡Angelina y Arthur estuvieron a punto de casarse! -exclama Julia, emocionada y mirando a Angelina de reojo.

Toma, eso sí es una sorpresa.

ENTRE MUGGLESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora