One-shots Sesshome

Despues de clases

Nota: el siguiente one-shot será relación maestra/alumno, siendo Kagome mayor. Solo será una diferencia de 5 años, espero les guste.

One-shot dedicado a AbbyTaisho
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La vista a la ciudad le parecía hermosa, el sol en lo alto del cielo daba un agradable calor que no era molesto y la suave brisa hacía todo aún más refrescante.

Sacó las carpetas y su maletín del auto mientras entraba en la universidad, algunos alumnos se le quedaban mirando y otros la saludaron cordiales mientras se dirigía al despacho del director.

Estaba algo nerviosa de impartir clases ya que sería un curso de hombres y por lo que sabía eran algo complicados, Naraku la llevó mientras daba algunas indicaciones de cómo tenerlos bajo control.

–Bien, silencio todos– dijo el ojirojo mientras dejaba entras a Kagome– ella será su maestra sustituta, Kagome Higurashi, tratenla con respeto.

–Buenas tarde a todos– habló la ojiazul haciendo una reverencia y sonriendo antes de dejar el maletín en el escritorio– Espero llevarnos bien.

Naraku la dejó sin decir más, la ojiazul comenzó a presentarse dando un poco más de su información y les pidió a cada uno decir su nombre, luego de veinte minutos comenzó a escribir en el pizarrón y comenzaron las palabras subidas de tono por parte de algunos.

Los ignoro lo mejor que pudo, pero aquel lado salvaje que poseía le gritaba darse a respetar, tomó asiento leyendo su libro mientras los demás debían estar copiando todo en sus cuadernos, notó como dos alumnos se levantaban de su asiento e iban a ella, quien se levantó algo preocupada y retrocedió hasta la puerta.

–¡Paren ya!– el grito se escucho desde el fondo, todos voltearon al peliplata que enojado miraba a sus compañeros y los filosos ojos dorados parecían quemar sus almas– Déjenla y pongan atención a la puta clase.

Los dos individuos hicieron lo dicho, Kagome recordó vagamente que Naraku le había hablado de él, Sesshomaru Taisho, hijo del magnate Toga Taisho, un chico que tenía una actitud de temer, una fuerza inigualable y sin duda era un antisocial.

Kagome siguió dando la clase, a la hora del recreo fue para hablar de lo sucedido con Naraku, más tarde fue a preparar la clase del día siguiente y fue al salón continuo donde había estado.

Durante el resto del día pensó que debía agradecer a Sesshomaru por salvarla de aquellos alumnos, así que lo esperaría en la salida para dar su más sincero agradecimiento.

–Es todo por hoy, nos vemos en la siguiente clase– todos los alumnos hicieron una reverencia mientras ella salía y guardaba su carpeta en el maletín, respondió un mensaje antes de adelantarse a la salida para que Taisho no se fuera.

Los alumnos salían agrupados, algunos más rápidos que los otros quizá por asuntos pendientes, muchos iban en dirección al centro quizá para divertirse y mientras se percataba de ello notó como Sesshomaru se acercaba a un auto estacionado, ¡se iba y ella no se había dado cuenta!

–¡Sesshomaru!– le gritó alzando la mano y mostrando una sonrisa, el peliplata dejó su bolso dentro del auto y luego se apoyó en el capó– lamento detenerte así.

–Que necesita– habló mirándola de pies a cabeza, de rostro era hermosa, pero había elegido pésima vestimenta, se preguntó como sería verla con ropa más ajustada– que sea rápido, tengo cosas que hacer.

–Solo deseaba agradecer– sintió cierto enojo ante su actitud, pero aún así no se iba a retractar– realmente no sabía que hacer contra esos jóvenes, ya sabes, no puedo llegar y golpearlos.