Take Me To Church - Hozier"We were born sick",
you heard them say it◦❀───────────────────❀◦
Lo cierto era que para Lisa, en términos de dormir con una persona... Jennie dormía muy mal.
Pasaba la mayor parte de la noche dando vueltas sobre el colchón, encaramaba su muslo sobre el estómago de la gitana para diez minutos después quitarlo y darse la vuelta. Después volvía y metía la cara en su cuello y después o podía subirse encima de ella y dormir así o volverse a voltear y dormir boca abajo.
Igual que las primeras veces, esta situación le causaba bastante gracia a a Lisa. Más que todo porque ella siempre había sido bastante tranquila al dormir, conciliaba el sueño muy facilmente y por lo general dormía boca arriba con las manos entrelazadas sobre su estómago o de costado abrazando a Jennie. No había muchas posiciones que quisiera elegir.
Esa mañana en específico se levantó con tres cosas:
Dolor de cabeza por una resaca buscada.
La bestia despierta dentro de su bóxer.
Jennie acostada sobre su cuerpo. Literalmente encima, con las piernas a los costados de su cadera y la mejilla pegada de su pecho.
Lisa parpadeó varias veces, tratando de acostumbrar la mirada a la lámpara a su costado. Normalmente dormía en penumbras pero desde que Jennie le comentó que le tenía miedo a la oscuridad ahora la regulaba y la dejaba encendida toda la noche.
Ahora que se ponía a pensar, muchos de sus hábitos diarios se habían amoldado inconscientemente a Jennie. No era algo que le molestara del todo porque desde que sabía que la amaba también sabía que quería servirle y cumplirle todo lo que quisiera.
Su gatita resultó ser adorablemente ordenada, al punto en el que Lisa la miraba fastidiada cada vez que se quejaba cuando la veía quitarse la ropa y dejarla en el suelo. Ahora había hecho que destinara una cesta especialmente para ropa sucia.
Luego estaban esos momentos en los que sí comían dentro de la habitación, no podía dejar que pasara la comida y se relajara un poco antes de que Jennie estuviera hincándole las costillas para que se levantara a dejar el plato en el comedor nuevamente. Lavado, obviamente.
La obligaba a ducharse antes de poner el trasero en la cama (a menos que sea una situación como la noche pasada en la que no podían quitarse las manos de encima) y sólo después de estar limpia podía acercarse al sitio en donde dormían.
Y ni hablar del baño, Jennie era bien tiquismiquis cuando se trataba del mismo. Había apilado todos los artículos de higiene personal en otra pequeña cesta también porque todo necesitaba estar en un sitio para fácil acceso y no regado por todos lados.
Más allá de que la gatita sea un poco obstinada, Lisa apreciaba el cambio pequeño dentro de su entorno. La cama bien hecha, el olor a lavanda, los cepillos dentales juntos, la ropa limpia, la sonrisa que le producía el ceño fruncido de Jennie restregando la esponja contra la bañera como si fuese su peor enemiga.
Porque no era que Jennie se encargara en sí de todo el asunto, era que involucraba directamente a Lisa para que no pensara que debía esperar a que Jennie lo hiciera primero. No se trataba de quién hacía más que la otra, sino de ser un equipo que mantuviera todo ordenado ya que así el entorno era mucho más agradable.
Y era verdad, Lisa no quería volver a los momentos en los que acumulaba latas de cerveza a los costados de la cama y ni siquiera se preocupaba por tomar un baño después de un entrenamiento porque de todas formas nadie la iba a oler.
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Juro que (JENLISA G!P) [Parte 1 y 2]
FanfictionEclipsada en lujos, nepotismo y privilegios, Jennie pensaba que su vida sería así para siempre. Se había abandonado a las circunstancias en las que nació; reprimida por el patriarcado, robotizada en protocolos y amada por millones de ciudadanos simp...