Juro que (JENLISA G!P) [Parte 1 y 2]

Capítulo 57

You're So Dark - Arctic Monkeys

And you're so mysterious
Got that obsession with death

◦❀───────────────────❀◦

Después de unos días el búnker se sentía un poco solitario. Todavía estaba presente el 70% de la población, pero era un toque diferente sin el griterío de los más fuertes. Y era verdad, la camaradería entre los oficiales se palpaba en el aire. Los gitanos que quedaban desde luego extrañarían la presencia de los otros en el proceso.

Lisa ya tenía poco más de una semana de haber salido del peligro y retomó sus actividades en la oficina a expensas de las protestas de Jennie. De igual forma solo se encargaba de organizar planes internos.

En palabras de la gitana... Era hora de empezar a sabotear al gobierno.

El vídeo de los gitanos calcinándose necesitaba hacerse público. Era un secreto a voces lo que el gobierno de Gran Bretaña hacía. Los países que no eran aliados tenían en conocimiento que apresaban indocumentados, esto también los sabían los mismos ciudadanos, pero las prácticas mortales eran algo que seguía siendo un simple rumor.

Aparte de ese metraje también existían otras pruebas con las cuales los gitanos podían empezar a sabotear la imagen que tenía el gobierno. Cosas que habían guardado a lo largo de los años para usarlas en el momento ideal. Más allá de los problemas con los gitanos, el gobierno estuvo mancillando una publicidad negativa ante los impuestos excesivos, el incremento de fuerza policial hasta para los mismos ciudadanos, el declive de los servicios públicos y la expropiación de empresas privadas para ahora dominio del estado.

Era demasiada mierda acumulada, cosas en las que podían escalar para alcanzarlos de a poco. Tomaría tiempo cambiar la imagen general, pero no era imposible.

El inicio de todo era ese video.

Con la ayuda de los líderes de los otros refugios y personal pagado de periódicos nacionales podían llegar a todas las esquinas del país. Esa era también una tarea para Rosé pero en el rango internacional, mostrarle el video a los coreanos y esparcirlo por los países vecinos.

Traía muchos riesgos, desde luego. El gobierno podría tomarlo como incentivo para retomar la matanza de los prisioneros que ya tenían e indirectamente estarían confirmando que Jennie ya no es un impedimento para que los gitanos ataquen. Era cuestión de tiempo para que Raewon se diera cuenta del cambio de bando.

Y también eventualmente sabrá que Jennie ahora estaba con Lisa y no solo eso, que estaban casadas. Pero ya no podían ocultar el asunto mucho más.

En ese momento Jennie entró en la oficina, la gitana había pasado más de lo acordado sentada en su silla. Se supone que limitaría sus horas de trabajo a la mitad de lo que hacía antes, pero era un poco terca.

—¿Vas a seguir sentada alli o esperarás a que tome tu oreja entre mis dedos?

La gitana alzó la mirada a ella en ese instante, con el amago de una sonrisa se ajustó los anteojos hacia atrás en el puente de la nariz. Había colgado una llamada satelital con Jungkook, el jefe del refugio más cercano. Tenían una buena relación desde hace un tiempo y Lisa le había dicho que haría llegar una copia del metraje para ponerse manos a la obra.

Pero era obvio que por la expresión de molestia de su adorada gatita no le hacía mucha gracia que continuara trabajando.

—¿Puedo poner mi polla entre tus dedos en vez de mi oreja, por favor? —preguntó con la misma sonrisa de chulería.