Capítulo 49

9.1K 982 926
                                    




Kill and Run - Sia

Victim of sensory love
You cry over my
An innocent call

(Recomiendo oír en loop mientras leen)

◦❀───────────────────❀◦

Hace quince años.

El sonido de la sangre escurriéndose es algo que jamás podría olvidar.

Todo era rojo, desde el rostro sudoroso de Kunpimook con los ojos expandidos de horror cuando la hoja del cuchillo cortó su yugular hasta la sangre derramándose como una tubería dañada, manchando el suelo en una muestra gráfica de muerte.

Los ojos de Mino parpadearon con rapidez al mismo tiempo en que algo se había trancado sobre su pecho, lo mismo le imposibilitó el respirar ante la vista. Hubo otro sonido, el de la cabeza de Kunpimook estrellándose contra el suelo mientras se desangraba y los gritos incoherentes alrededor, como una jauría aplaudiendo una masacre.

El fin de una era, de un líder. La barbarie fue tomada como una celebración.

La mujer de mirada celeste y mejillas manchadas de rojo alzó la barbilla hacia Mino, el cuchillo bailando en círculo entre sus dedos como si se burlara de él. El reto estaba implícito en sus pupilas, preguntando silenciosamente sí haría algo al respecto. Las dagas azules no se apartaron de él mientras hincaba una rodilla en la columna de Kunpimook y tomaba su cabello en un puñado.

Mino miró completamente petrificado cuando Lisa forzó la cabeza de su padre hacia atrás y comenzó a separarla del resto de su cuerpo con una fuerza digna de un animal.

Actualidad.

Una carcajada alta se escuchó en la pista de baile, era Jennie, dando vueltas entre risas con los pies descalzos mientras bailaba como si escapara de Lisa y al mismo tiempo coqueteaba para que continuara persiguiéndola. La gitana tenía una enorme sonrisa en la boca, descalza también al igual que la mayoría porque era más sencillo bailar así. Descontrolado, salvaje y caluroso.

Lisa practicamente trotó, abrazando la cintura de Jennie a su cuerpo con recelo mientras las carcajadas seguían retumbando. Algunos presentes no podían evitar distraerse un poco de sus propios bailes o conversaciones para mirar con humor a la pareja enamorada.

Algunos otros no ocultaban el juzgamiento, pero eran pocos a comparación de los que estaban realmente disfrutando de la fiesta.

—No puedo respirar. —se quejó Jennie por el abrazo, tratando de zafarse juguetonamente de Lisa.

La gitana clavó sus labios en su cuello, mordisqueándolo sin importar el que mirara. Aflojó un poco el agarre, pero no lo suficiente para lograr que se escapara otra vez.

Había pasado la última hora bailando con la princesa de forma desinhibida, los tragos estaban haciendo efecto para esa hora de la madrugada. No estaban mirando el reloj pero era muy probable de que estuviera amaneciendo, las novias se habían ido hace mucho para su noche de bodas y el resto se quedó para disfrutar de la comida y el alcohol.

Lisa la jaló hasta la mesa que compartían con la familia Park y los allegados, todos mantenían el semblante tranquilo y alegre mientras charlaban. La gitana se sentó y dejó que Jennie se sentara también en su regazo.

La joven recuperó los vasos que habían dejado olvidados y le extendió uno a su novia.

—¿Después podríamos perdernos un poco? —preguntó la joven mientras se inclinaba contra su oído.

Juro que (JENLISA G!P) [Parte 1 y 2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora