Santorini era un pequeño archipiélago circular formado por islas volcánicas. Su arquitectura era una maravilla, pues constaba de casas encaladas que coronan escarpados acantilados.
Cuando llegamos terminamos por movernos en pequeñas camionetas vans que nos trasladaron hacia una hermosa casa en uno de sus acantilados que tenía una vista hermosa. Varias personas que venían con nosotros en el avión terminaron por ingresar nuestras cosas.
Yo seguía mirando como el color blanco con el azul le daban ese toque de tranquilidad a la casa. Esta contaba con una gran piscina que tenía mesas y sillas playeras modernas a su alrededor. Nick me guio por unas escaleras blancas que me llevaron a una pequeña terraza que tenía en total 6 habitaciones alrededor.
Cada uno de los Manrique terminaron por ingresar a las habitaciones. Nick me guio hacia una de ellas de la cual venía saliendo uno de los hombres de su personal de servicio que había venido con ellos.
—Nick. Ya las cosas están en su habitación — le menciono y Nick asintió.
—Gracias, señor Rhys — le dijo mientras me corría para que él pudiera salir.
—Gracias, señor — le dije en tono gentil.
El señor salió y Liam salía de su habitación que se encontraba junto a la nuestra lo miro con una sonrisa y se acercó a él.
—Papá. Ya está todo en orden — le dijo Liam lo que me tomo por sorpresa.
—Gracias hijo — le menciono el señor con cariño.
Nick tomó mi mano y me guio al interior de la habitación, sin mencionar palabra alguna. No tuve tiempo de detallar la habitación, pues Nick estaba en completo silencio y solo siguió para ubicarse en un banco de madera que se encontraba en el recibidor de la habitación.
—¿Papá? — le dije cuando vi que se sentó en el pequeño banco.
—Es mi papá — me dijo en tono apagado mientras me atraía a sus brazos y me sentaba en sus piernas.
—¿Pero? — le dije ante su silencio.
Nick solo tomo una profunda respiración y yo empecé a pasar de forma suave mi mano por su cabello. Lo único que sabía de ese señor era que los había abandonado y ahora resultaba aquí como si nada. Lo peor era que algo debía tener para que Nick no se sintiera cómodo con su presencia y no me lo hubiera presentado antes.
—La verdad mi relación con él no es tan cercana, como lo es con Liam — me dijo en tono melancólico.
—Él se lo pierde. Porque tú eres el mejor — le dije con una sonrisa.
No entendía que le pasaba a ese señor, pero si no quería tener una buena relación con Nick él se lo perdía, porque Nick era el mejor de los Manrique.
—Mi dulzura — me dijo en tono dulce.
Le sonreí y rodé mis manos en su cuello y le di un suave beso. Nick me correspondió mi beso y me tomo de forma delicada en sus brazos. Cuando nos separamos él me sonrió y se acomodó en la banca.
Me levanté de forma suave de sus piernas y pude apreciar por fin la habitación. Era grande con una inmensa cama de sábanas blancas, muebles rústicos en madera. Tenía un balcón hermoso y un baño cómodo. Nuestras cosas ya estaban organizadas en el armario.
—Esta habitación está hermosa — le dije mientras me acostaba en la cama.
Cerré los ojos y respiré de forma suave sintiendo la tranquilidad del lugar y frescura del lugar. Sentí el peso de Nick sobre la cama y cuando abrí los ojos lo encontré encima de mí mirándome con su hermosa sonrisa.
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6.El Alfa Implacable
WerewolfNick Manrique Walsh, es el menor de sus seis hermanos. Alguien dulce, amigable, sociable y con un gran atractivo físico, que lo cataloga como el hombre perfecto. Bueno eso es lo que piensan todas las chicas del instituto o cualquiera que lo conozca...