Capítulo 2.27 Rhys Walsh

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Espere pacientemente a Alana. Al parecer el señor Jarol estaba en un nuevo tratamiento debido a que se sentía mal y su corazón se sentía más cansado y agotado. Mi pobre dulzura se encontraba muy triste, pero ya había comprado un vuelo. Si en los próximos siete días ella no llegaba, yo me irá a acompañarla.

—Buenas noches — saludo un hombre mientras ingresaba al comedor.

Detallé al hombre mientras terminaba de comer el sándwich que había mandado a preparar. La cena ya había pasado hace rato, pero igual tenía hambre.

El hombre me detallaba con intriga y lo analice, mientras veía como sus ojos miel me recorrían mientras intentaba buscar algo en mí.

—Buenas noches. ¿Qué necesita? — le dije al ver que me miraba con curiosidad, pero no pronunciaba una sola palabra.

—¿No me conoce? — me pregunto curioso.

Lo miré sin entender muy bien a que se refería. Pero me puse de pie y lo estudie con parsimonia. Era un hombre de unos 65 años, se notaba que era uno de nuestros lobos, pero su cuerpo se veía delgado y su cara demacrada. A pesar de todo tenía una buena estatura, su postura era firma a pesar de que se veía enfermo.

—Disculpé señor — le dije sin entender su pregunta.

El hombre me miro con ojo asombrado y se acercó de forma tranquila a mí. Pero me puse de pie y en señal de alerta. No sabía qué hacía este señor aquí, pero tenía que tener cuidado por si decidía atacarme.

Santiago, Rossan, Liam y Arman ingresaron de forma alarmada, como si buscaran algo. Cuando la mirada de ellos se posó en el extraño hombre. Mi hermano lo miro con rabia y molestia, mientas se acercaba a él deforma amenazante.

—¿Qué hace usted aquí? — le dijo Santiago con mucha rabia.

—Rhys — le dijo mami Rous con asombro.

—Rossan — le respondió el extraño sin poder creer que estuviera aquí.

—Es nuestro... — menciono Arman sin poder terminar la frase.

—Padre — respondió Liam con cierto grado de sorpresa y alegría.

El extraño era nuestro padre. Cuando la información me llego, pude detallar que guardaba ciertos rasgos con nosotros como su estatura y ciertas facciones de su rostro. Lo seguí observando sin poder creer que él había vuelto.

Lo único que sabía de él era que nos había abandonado cuando mi mamá se murió, porque no se sintió con la capacidad para cuidarnos. Para Santiago era un borracho, para Damien era un ladrón que nos había robado nuestro dinero ante de huir. Para Tyler era solo nuestro padre que nos dejó y para Arman, Liam y yo solo era un desconocido.

—Por desgracia — menciono Santiago con tono agrio.

—Soy su papá — nos dijo mientras nos miraba a nosotros.

—¿Qué quiere? — le pregunto Santiago en tono tajante.

—Quería verlos. Están grandes — menciono con remordimiento y nostalgia,

—Si es que recuerda algo. Porque nos abandonó — le dijo Santiago con fastidio.

—Yo me sentía perdido sin Margaret — le explico a Santiago con preocupación.

—Por eso dejar a niños solos, era lo mejor — le recrimino Santiago.

—Yo en verdad lo siento. Me dejé llevar por el licor y me perdí en mi depresión y soledad — se disculpó, mientras sentía como su voz se quebraba.

6.El Alfa ImplacableDonde viven las historias. Descúbrelo ahora