Lana, 17 años.
Llevo semanas en este lugar. Tantas que ya hasta me acostumbré al aroma fétido de la habitación... ¿O viene de ellos?
Ya no puedo seguir con la tortura. Apenas me alimentan y casi no bebo agua. Dicen que es un gasto innecesario.
Desearía estar muerta. Desearía estar en casa, siendo golpeada por mi padre, no esto.
Los hombres se turnan. A veces todos me usan al mismo tiempo, otras veces los demás miran mientras uno se encarga de mí.
Ayer me llevaron a una subasta. Las otras chicas y yo estábamos en fila mientras apostaban por nosotras. No sé cuánto pagaron por mí. Gritaron muchos números y yo apenas estaba consciente por las drogas que me dieron.
Dijeron mi nombre. Luego me guiaron a empujones por una habitación oscura. No estoy segura si subimos por un ascensor, pero el camino se sintió eterno.
Me dejaron en una habitación, vestida con un bikini, o algo parecido a eso. Apenas me cubría mis partes íntimas.
Y entonces, él entró.
El hombre que me compró pasó toda la tarde en el hotel, halagándome, haciéndome sentir bien, o eso es lo que debía decir. Lo aprendí a la mala, luego de que me golpeara por no responder cuando comenzó a probarme.
«¿Te gusta, zorra?», preguntó mientras se esforzaba por robar sonidos de mi boca. «Es lo que tendrás el resto de tu vida».
Espero que dicha vida sea corta.
En cuanto lleguemos a su casa iré a la cocina y me encargaré de apuñalarme en el corazón. Si es posible, lo mataré en el proceso.
Pero ahora, sigo condenada a estar dentro de estas cuatro paredes, encerrada con un grupo de idiotas que no me dejan en paz.
¿Sabrá que están usándome de esta forma? ¿Que estoy enferma y ahora él también? ¿Le importará? ¿Sabrá qué soy una pérdida de dinero?
Hoy es uno de los peores días. No he tenido descanso. Dijeron que, como mañana harán la transacción, disfrutarán de mi cuerpo por última vez.
Jamás me imaginé que había tantas formas de violar a alguien. Tantas formas de humillarlo y torturarlo —aunque antes de esto ni siquiera sabía qué era el sexo—. Ni siquiera sé qué les hice para que se desquiten así conmigo. Las otras chicas solo son violadas una vez en el día por uno de ellos. Yo los tengo a todos. Varias veces durante el día. Ya ni siquiera siento mis partes íntimas. Estoy entumecida.
¿Por qué yo? ¿Qué fue lo que hice?
El último tipo termina sobre mi rostro, me restriega los fluidos por la cara y me mete los dedos hasta el fondo de la garganta. Me abofetea el rostro. Otro me tira del pelo y me patea el estómago. Caigo en la esquina de la habitación. Él y sus amigos salen mientras se ríen de su hazaña.
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Grita Por Mí (+21) [Terminado]
RomanceMe traicionó una vez. ¿Cómo espera que vuelva a confiar en él? Lana: ¿Qué haces cuando el príncipe de tu historia se convierte en el villano? Hace dos años me rescató de una prisión solo para llevarme a otra peor. Dante Cassano me traicionó. Destroz...