Aleja su mano de la mía.
Puedo entender si me odia. Pero, ¿cómo podría haberlos rescatado antes sin ponerlos en un peligro inminente? No quería y no quiero que mueran. Por eso estoy haciendo todo lo que está en mis manos para mantenerlos seguros... pero tampoco soy Dios. Mis manos no son suficientes para todo el peligro que nuestra vida trae, tanto por mis decisiones como por las de su padre.
Si estuviera en mí poder brindarle una vida tranquila, alejada del tráfico, lejos de las redes, lo haría, incluso si eso significa que no será mía, ni que yo seré suyo. Si encuentra felicidad en esa vida, lejos de todo esto, con un esposo normal, que realmente la ame, no dudaré en apartarme, aunque eso me haga miserable.
Pero es casi imposible siendo una Müller y la persona a la que amo. Es un blanco para herirme. Algunos piensan que también para herir a su padre, pero ese hijo de puta jamás podría sentir algo por sus hijos. Para él solo son una herramienta más.
Ahora debo ser más precavido que nunca. Declan sabe de ella. De ellos. Todos saben que Finn es mi hijo. Aparentemente, Lana es la única que no lo sabía.
Las lágrimas se escapan de sus ojos. Lleva su mano al pecho.
—¿Por qué no me dijiste que eras tú? —Su voz se quiebra—. ¿Por qué no nos sacaste de ahí? ¿Por qué no me llamaste? Tu último mensaje...
—Fueron ellos. No yo....
—¿Por qué no peleaste?
—Lo hice. Incluso cuando creí que lo querías a él.
—Te quería a ti—llora—. Ese día, el día que me casé, yo... yo solo te quería a ti.
Me acerco a ella y limpio su rostro. No pelea, no forcejea. Solo me mira decepcionada.
—Te prometo que lo intenté, preciosa. Quería traerte conmigo ese día, pero Stefan y sus hombres hicieron guardia día y noche poco después de que me fui. Incluso compré ropa de bebé para Finn. Creo que aún están en la habitación.
»Muchos hombres murieron intentando sacarte de ahí, amore. Yo habría muerto si no esperaba el momento adecuado. Estabas siendo controlada, te seguían y no solo yo.
»Te juro, vita mia, que agoté todos mis recursos.
—Solo quería saber que también me amabas.
—Lana...
—Todos esos meses... —Aleja mis manos de su rostro—. Creí que fui un juego para ti. Creí que me habías usado. Me odiaba por quererte a ti y no poder enamorarme de Stefan, porque él sí estuvo para mí. Tú no. Creí que esa era una buena relación y la única que me merecía, pero incluso así te esperé a ti, día y noche.
»Todos esos meses quise que llegaras a rescatarme, incluso cuando me dabas miedo y no quería verte. Quería que me salvaras... y cuando lo hiciste ya era tarde. Ya me habían hecho creer que no valía nada.
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Grita Por Mí (+21) [Terminado]
RomanceMe traicionó una vez. ¿Cómo espera que vuelva a confiar en él? Lana: ¿Qué haces cuando el príncipe de tu historia se convierte en el villano? Hace dos años me rescató de una prisión solo para llevarme a otra peor. Dante Cassano me traicionó. Destroz...