CAP 49.

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Te mordiste el labio y te acercaste lentamente. De nuevo, después de tanto tiempo, sentías su respiración chocando en tu rostro. Cerraste tus ojos y disfrutaste, cada milésima de segundo, del sabor de sus labios. Eran tan cálidos, suaves y te hacían sentir que siempre debían estar juntos. Él tocó tus muslos y los cargó para que abrazaras su cintura con tus piernas. Posaste tus manos en su cabello y él dejó sus manos en tus muslos.

Caminó torpemente hacia la puerta de su casa y prendió las luces al entrar.

- Lo siento, pero no subiré- dijo separándose de ti.

- Por qué?- preguntaste con la respiración agitada.

- No tengo las fuerzas, las piernas me tiemblan. Te necesito dentro de mí ahora mismo.

Te sonrojaste y él te puso en el sofá de su casa. Comenzó a quitarte la camisa y tú se la quitaste a él también. Sus manos se posaron en tu botón del pantalón, viste que sus manos temblaban y sonreíste. Lo ayudaste para que se deshiciera de él lo más rápido posible. Le quitaste los suyos pero lo bajaste tan rápido que le quitaste los bóxers de una vez. Tus ojos quedaron como platos por la sorpresa, él soltó una carcajada.

- No es como si fuera la primera vez que lo ves- bromeó él.

- L-lo- lo sé.- dijiste mientras desviabas la mirada para ver sus ojos.

- No es justo.

- Qué cosa?

- Yo estoy completamente desnudo pero tú todavía tienes tu ropa interior- protestó Zayn con una ceja levantada.

- Siéntete libre de quitármela.- respondiste con voz seductora, poseída por el deseo.

- Tus deseos serán más que órdenes para mí.

El moreno posó sus manos en tus tangas y las bajó rápidamente, luego pasó sus manos por tu espalda haciéndote la piel de gallina. Desabrochó tu sostén y ahí estaban los dos: Como Dios los trajo al mundo. Él se volvió a acercar a tu rostro y besó tu labio inferior, lo succionó y luego lo soltó, siguió bajando hasta tu cuello y tú te fuiste acostando más y más en el sofá. Sus besos se detuvieron cuando sentiste que su miembro rozaba tu feminidad.

- Hazlo, Zayn! Hazlo de una vez!- gritaste suplicante. Sentiste la respiración de su risa chocando en tu cuello y seguidamente sentiste cómo entraba en ti. Se movía en forma circular haciendo que soltaras gemidos a la diestra y siniestra.

- Me encantas, me-me encanta hacerlo contigo, no quiero hacerlo con nadie más.- dijo Zayn después de haberse corrido dentro de ti.

Suspiraste y cerraste los ojos quedando profundamente dormida.

Al frente de la ventana -ZaynMalik-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora