Al frente de la ventana -ZaynMalik-

Maratón {1/3}

CAP 92.

Siguen las trampas

El día se te hizo eterno, hasta que finalmente llegó la hora de salida. Ya le habías avisado a Roraima que no te fuera a buscar porque te irías con Logan y Daniela hasta tu casa para hablar con tu madre. Necesitabas comprobar que no era una de sus pequeñas trampas para que te quedaras en casa con ella. Cuando llegaron comenzaste a subir inmediatamente las escaleras.

- ¿No quieres comer primero?- preguntó tu hermana desde la cocina.

- ¡No! – gritaste para que te escuchara, tocaste la puerta del cuarto de tu madre y esperaste aguantando la respiración.

- Pase- respondió tu mamá y sin esperar más abriste la puerta.

- ¿Cómo estás? – preguntaste por cortesía y costumbre mientras te acercabas para arroparla mejor y besar su mejilla.

- Podría estar mejor.

- ¿De qué querías hablar? – dijiste yendo directo al grano, tu mamá aclaró su garganta.

- Quiero que vuelvas.

- ¿Por qué he de hacerlo si no te importa lo que haga con mi vida?

- Claro que me importa, por eso intento impedir la boda- sentiste sus palabras como una daga en tu pecho ¿Impedir la boda?

- ¿Qué?- preguntaste sorprendida y aterrorizada.

- Cariño, eres mi hija. Y como tu madre es mi deber...

- Cuidarme... - interrumpiste acertando, siempre te decía lo mismo cuando no quería que hicieses algo.

- Sí, correcto.

- Claro, mamá. ¿Sabes? Acabo de recordar- seguiste diciendo mientras te parabas de la cama y mirabas tus manos temblorosas por la impotencia-... dejé algunas cosas en la casa de Roraima y debo ir a buscarlas. O mejor aún: me quedaré allá para cuidarlas ¿Te parece?

- Megan, no tienes por qué hacer esto.

- ¿Oh, en serio? ¡Ay, cierto! Eres mi madre y debes protegerme, claro- decías sarcástica caminando hacia la puerta.

- ¡Megan, te ordeno que no me des la espalda cuando hablemos!- gritó tu mamá en vano- Si te vas no quiero volver a saber nada ti.

- ¡A la mierda con todo esto!-cerraste de un portazo y bajaste las escaleras con ganas de romperlas con cada paso que dabas.

Daniela te miraba desde la cocina, estaba asustada.

- Cuídala- le ordenaste y saliste de la casa.