CAP 69.

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De vuelta a nuestras andanzas

No le respondiste pero él sabía que sentías lo mismo así que no hacía falta que lo dijeras. Tomó tu mano y fueron a una agencia donde alquilaban autos para pasear por la ciudad. El moreno había hablado con el lugar antes de viajar y ya lo estaban esperando. Al tener las llaves en sus manos Zayn abrió la puerta para que entraras y luego se subió él.

- Supongo que ya no me montaré en tus piernas- dijiste con voz seductora. Él rió

- No aquí, pero si quieres ir a otra parte...- comenzó a decir mientras acariciaba tus muslos.

- La verdad, sí. Sé que no has almorzado y quisiera que fuéramos a un restaurant.- respondiste mientras ponías tus manos sobre las suyas.

Al llegar al lugar pidieron una mesa para dos, el lugar era muy bonito... bastante italiano.

- En-enseguida les traigo su pedido- respondió nervioso el mesero.

- ¿Qué sucede?- le preguntaste al moreno cuando el chico se fue.

- Eso me pregunto yo- respondió sonriendo-, estás tan sexy y hermosa que el chico no pudo quitar los ojos de ti mientras anotaba el pedido, seguro no escribió nada.

- ¿En serio? ¿Y era lindo?- preguntaste dándote la vuelta para verlo.

Cuando volviste la mirada tenías una sonrisa traviesa mientras te mordía los labios más sexys del mundo para Zayn.

- No lo sé, ¿lo estaba?- preguntó con voz ronca.

- La verdad, tú estás mucho más sexy, querido.

El moreno estaba a punto de tirar de la mesa y comerte a besos mientras te decía lo mucho que te extrañaba pero en eso volvió a llegar el mesero. Habían pedido pasta porque ¿Qué mejor lugar para comer pasta que en la propia Italia? El pequeño rubio sirvió el plato de Zayn y después el tuyo. Comenzaron a comer, tú no comiste mucho por los nervios que tenías de estar de nuevo al frente de él, pero Zayn, en cambio, no habló casi porque todo lo que hacía era comer. Y todo lo que tú hacías era detallarlo: su cabello estaba un poco más largo, tenía un nuevo tatuaje era una especie de micrófono. La barba anunciaba que comenzaba a crecer pero no te importaba, de hecho pensaste que se le veía muy sexy.

- Aah, uds los italianos saben muy bien lo que es una buena comida- elogió el moreno al mesero que estaba recogiendo los platos y retiraba el dinero y justo cuando se iba a ir se le cayó todos los platos en tu ropa.

- ¡Idiota!- gritaste, toda tu blusa tenía ahora una gran mancha roja por la salsa y la grasa, querías matar a ese niño.

- Mil disculpas, lo siento muchísimo- se disculpó el chico mientras ponía los platos de nuevo en la mesa y sacaba un paño para limpiarte... o eso intentó.

- Ni se te... ocurra- decía Zayn tomando la mano del mesero impidiendo que te tocara.- De eso nos encargamos nosotros, gracias. Y para la próxima sé más prudente, galán- respondió el moreno dándole unas palmaditas con su mano en la mejilla del rubio mientras le guiñaba el ojo.

No pudiste evitar no reírte de su sarcasmo y tomaste su mano para ir al auto.

- ¿A dónde nos lleve el destino?- preguntó el moreno divertido mientras el motor del auto rugía al encender y avanzaba rápidamente. Él había cambiado, pero para bien.

- Te noto distinto, Malik- dijiste riendo.

- ¿Distinto bien o distinto mal?- preguntó mientras ponía una mano en tu muslo de nuevo.

- Distinto bien, muy pero muy bien, Malik- dijiste mientras ponías una mano en su pierna apretando su muslo.

El moreno dio un pequeño brinco pero se relajó.

- Yo también tengo ganas de jugar- dijo subiendo las manos hasta casi llegar a tu intimidad pero lo detuviste.

- Podemos chocar, Malik.

- Vamos al hotel.

Al frente de la ventana -ZaynMalik-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora