Al frente de la ventana -ZaynMalik-

CAP 112.

El gran día

Pov. Megan

El clima estaba soleado y ni rastro de nubes cerca. Había sido el mejor día en meses. Con suerte la boda sería hermosa.

El vestido estaba atrás de la puerta del hotel. Las mariposas en mi estómago no se irían tan fácilmente. James y Destiny corrían por toda la habitación y Zayn iba atrás de ellos.

- No corran, venga acá- decía el moreno entre risas-. Son sólo medias.

- Buenos días - dije mientras bostezaba.

- ¡Mami! - gritaron los niños corriendo en dirección contraria al padre y comenzando a saltar en la cama.

- Por orden - dije riendo mientras Zayn apoyaba sus manos a sus rodillas y respiraba cansado.

- Tú primero, Desty- cedió el pequeño James dejando que su hermana me diera el beso de los buenos días.

- Ahora tú, hombrecito- le dije a mi hijo para que se acercara.

- Y ahora tu esposo- dijo el moreno acercándose para besarme.

En eso las puertas se abrieron de par en par y mi mamá y la mamá de Zayn entraban junto con Daniela, Camila, Roraima, Gemma, Karla con Niall Jr, Rocío y un ejército más para arreglarme en el gran día.

- Buenos días, suegrita. - dijo el moreno saludándola- Madre.

- Buenos días, Zayn- dijo mi madre sonriendo y me paré para saludarlas.

- Zayn, querido, tu papá te espera abajo junto con tu futuro suegro.

El moreno se llevó una mano para rascarse el cabello mientras reía de lado, me vio y me guiño un ojo

- ok- se acercó y besó a su mamá en la mejilla.

- Yo me llevo a los pequeños - dijo Karla tomando a Niall Jr, James y a Destiny en manos.

- Muy bien, manos a la obra- comenzó a decir la peluquera mientras dejaba en la mesa de la sala un pequeño maletín.

- ¿eso es todo? - preguntó Karla.

- No- dijo irónicamente una de las maquilladoras abriendo la maleta.

El estuche se abrió de par en par y salieron pequeños sets de la nada. Cada espacio eran para algo: rubor, máscaras de rímel, brochas, sombras etc. Este iba a ser un largo día.

Las horas pasaron y nunca me dejaron verme en un espejo. Todo debía ser "sorpresa". Finalmente llegó el momento, faltaban sólo minutos para bajar a la boda.

- ¿cómo me veo?- pregunté al ver a todas con la boca abierta. Mi mamá comenzó a llorar.

- ¡Estás hermosa!

Dicho eso comenzamos a bajar por el hotel. La recepción quedó hermosa. Flores y cristales en jarrones. Me llevaron hacia la puerta de la misa.

La ceremonia ya había comenzado. Habían cientos y cientos de invitados. Muchos llorando y otros sonrientes de la emoción. Y sin darme cuenta ya había llegado el momento:

- Si hay alguien que tenga algún motivo para evitar la unión de esta feliz pareja, hable ahora o calle para siempre.

Nadie habló. Mi corazón se aceleraba.

- Bien, ante el poder que Dios me ha otorgado los declaro Marido y Mujer, puede besar a la...

Pero antes de que terminara la frase se escucharon unos pasos por el pasillo y el grito de asombro de los invitados. Era una chica morena, de cabello largo castaño y de gruesos labios.

-¡Yo me opongo!