CAP 55.

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Pov. Kendall

Estaba buscando el desayuno de Megan en la cocina cuando escuché que tocaron el timbre, agarré la bandeja y me dirigí a la sala. Casi se me caen las cosas cuando vi que Megan había abierto la puerta y que dos personas la miraban de arriba abajo, entre esas dos personas, mi novia.

- Kendall!- gritó la chica al verme con una ceja levantada y los brazos cruzados.

- Samantha...- dije casi sin aire, no era la mejor escena que podía ver: Una chica con una tremenda figura y usando únicamente mi camisa y además, yo le estaba llevando el desayuno.- ... Carlos- completé de decir al ver a mi amigo.

- Te dije que la cuidaras, no que se acostaran- respondió Carlos a la defensiva.

- No nos acostamos... verdad?- preguntó Megan algo insegura al formular la última palabra, sonreí de medio lado pero desapareció de inmediato.

- No, no lo hicimos. Se había desmayado en el taxi y no sabía cuál era la dirección de su casa así que la traje a la mía.

- Y por qué tiene tu camisa?- preguntó mi novia.

- Porque... los paparazzis le lanzaron un líquido cuando llegamos abajo y no quise dejarla así.

- Qué considerado, amorcito- dijo Samantha sarcástica y matando a Megan con la mirada haciendo que ésta se sonrojara.

- Creo que ya debo irme- dijo Megan recogiéndose el cabello en una cola de caballo, se veía extremadamente... sexy?

- Quieres que te traiga un balde de agua fría?- preguntó mi novia sacándome de mi transe.

- No, gracias. Quieres desayunar?

- Sí. Pero no aquí.-dijo en voz baja viendo a Carlos quien estaba de espaldas a nosotros viendo unas fotos mientras esperaba que Megan terminara de arreglarse.

Entendí el tono pícaro de mi chica.

- Por qué no?- pregunté en su oído mientras la tomaba por la cintura y la pegaba a mi cuerpo- aquí nos podríamos divertir más.

Ella me respondió con una de sus miradas, de esas en la que los ojos le brillan y con una sonrisa que no mostraba sus dientes, sólo alargaba sus hermosos y carnosos labios.

- Si habrá diversión entonces quedémonos aquí las horas que quieras.

Solté una carcajada que hizo que Carlos volteara, o simplemente había volteado cuando escuchó los tacones de Megan acercándose. Me miró de reojo y con una sonrisa algo apenada. Mi novia me soltó de mala gana para que yo me despidiera de la chica.

- Muchas gracias por todo... y disculpa la molestia- dijo Megan con una tierna sonrisa, le sonreí de vuelta.

- No hay de qué y no tienes de qué preocuparte- me acerqué para abrazarla y ahí estábamos: Cuerpo a cuerpo y yo, quedando completamente obsesionado con su perfume, se había introducido en mi garganta y hacía que me doliera. Quería comerme a esta chica, quería que cada parte de su cuerpo fuera mío.

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Al frente de la ventana -ZaynMalik-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora