Masacre, la venganza de Jeff.

362 22 0
                                    

Narra Jeff.

Desde que apareció Nina, Artemis anda demasiado distante.

Ya casi no habla, ni come, no se que fue lo que paso entre ellas.

Lamentablemente Nina escapo, sabe que no dañaría a Artemis y la uso de escudo.

Hace una semana Artemis se estanco en si misma, ya no se levanta de la cama para nada. Ni come.

Por mas que la obligue o que me quede todo el día acostado con ella acariciando su cabello no reacciona. Ni con Leina, Ni con Grant, ni con los chicos. Ella simplemente esta en estado de pausa.

Disidido, a obligarla a que coma, se bañe y que salga. Le preparo su desayuno favorito. Y se lo llevo a la habitación.

Pero lo que me encuentro arruina mis planes.

-Artemis...¿ que mierda haces? baja eso.- pregunte con temor.

-Estoy harta de esto... ya no mas.- dijo llorando y apretando el arma mas a mi cabeza.

-¿a que te refieres con esto, Artemis? suelta el arma, lo alegraremos, si quieres mudarte lo aremos pero no aretes el gatillo.- dije tratando de apresurar mis pasos ara evitar que haga algo con ese arma.

- Es curioso como en solo un segundo pasas a ser solo un recuerdo.- dijo ella y me aventé hacia ella para quitarle el arma.

Lamentablemente ella, disparo al mismo tiempo. Atravesando su cráneo.

Lo que ella no sabe es que, ahora que tiene cadejos ella no puede morir. Pero aun así me desespere por completo, sintiendo el inmenso dolor de tan solo pensar que ella me deje.

Cuando su herida cicatrizo, la lleve a la bañadera, para quitarle todas las manchas de sangre. Y luego la acosté en la cama

Esto, esta maldita mierda, es culpa de Nina.

Luego de llamar a Eyeless para que la cuide. Emprendí un viaje a la casa de Nina.

Desde que hizo su primer aparición, busque en secreto la dirección de su hogar. Me costo demasiado tiempo para hallarla pero antes de ayer la encontré.

Antes de llegar a su casa vi como uno de sus secuaces se marchaba de su casa, así que lo seguí.

Espere a que todos a pagaran las luces u entre en acción.

Con la punta de mi cuchillo, abrí la puerta de su casa, entre como si nada, y me coloque a acondicionar la mesa del comedor para el y su familia.

Cuando comencé a buscar a las personas que vivían aquí, encontré a dos de hombres. Las imágenes de aquel vídeo aparecen en mi mente, son los que violaron a mi bebe.

Sacando un pañuelo y bañándolo en cloroformo, se lo coloco en el rostro a los hombres dejándolos mas inconscientes de lo que estaban. Los arrastro a la casino y los ato a la silla de la mesa del comedor. Busco mas personas en la casa y encuentro con el tercer violador en una habitación y hago lo mismo con como a los otros dos,sigo buscando en la casa y me encuentro con una pareja de ancianos.

Hago lo mismo que hice con los otros, y los ato en la cocina.

Ordenándolos los tres violadores en un lado de la mesa y a los ancianos del otro lado

Comienzo a cortar el cráneo de los ancianos, separando la tapa de sus sesos y dejándola sobre la mesa y separo los ojos de sus rostros y los coloco al frente de la tapa de los cráneos, en perfecta posición para que los ojos miren a los malditos. Comienzo a cortar el cerebro de los ancianos y cada trozo lo coloco en la tapa de los sesos.

Comienzo a despertar a los muchachos y me escondo detrás de ellos para que lo primero que vean sea a la pareja de ancianos.

-!!MAMÁ!!¡¡PAPÁ¡¡- compensaron a gritar y a foseguear para que se zafaran de los amarres de la silla.

-¿Eran sus padres?- pregunte llamando la atención de los tres.

-MALDITO ENFERMO.-

-Que ironía,¿no? quien es mas enfermo, si 3 malditos violadores hayan torturado y violado a una niña de cuatro años y la hayan matado, o yo que asesine a sus padres por venganza.-

-Vete a infierno maldito enfermo.-

-Por milésima ve, ya se adonde voy a ir.-

-No me arrepiento de lo que le hice a la zorra de tu hija, si tuviera la oportunidad lo haría otra vez.- dijo uno con demacrado coraje. Sonreí de la forma mas retorcida.

-¿Tienen hambre?- pregunte tomando un roso de cerebro de uno de los ancianos.

-¿que?- preguntaron los tres al unisono, mirándome con horror.

-Abre la boca.- dije tomando la cabeza de uno de ellos.

-No, por favor.-

-No sabe tan mal como se ve, abre la boca o te are sufrir de la peor manera.-

Una ves que termine de darles de comer, los bañe con lejía para luego prenderlos fuego.




 Jeff The Killer  [Borrador]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora