Luego de llamar a casa para verificar que todo se encuentra bien. Manejo a la casa de Nina.
Sabiendo que ella tiene una debilidad, por mi directamente toco a la puerta.
Ella abre la puerta, con desesperación, en lo que noto que tiene cámaras.
-Hola, Nina.- dije tragándome el veneno para no saltar a su cuello y no matarla.
-Hola, Jeff ¿que es lo que haces aquí?-
-Vengo por ti, lo pensé bien y voy a dejar de jugar, solo te necesito a ti.-
-¿Y Artemis?- pregunto dudando. Estire mi buzo blanco anchado de sangre fresca, y la mire a ella.
-La mate.- ella mordió su labio y se corrió dejándome pasar a su casa.
Un escalofrió, me recorrió de pies a cabeza al ver que su casa solo se encuentra con fotos mías. Y que su maldita mirada no se quita de mi.
-Hazme saber que ya no sientes nada por ella, que en verdad la matarte, que estas aquí para quedarte con migo.-
Me acerque a ella y comencé a besar su cuello. Comencé a arrastrarla a una silla en donde la senté y comencé a manosearla.
Sin que se diera cuenta la ate a la silla.
-¡¡¿QUE DEMONIOS?!!- grito ella
-¿Que? ¿ no te gusta el sado masoquismo?-
-No, suéltame.-
-Na eso no va a pasar.-
Con una gran sonrisa y tarareando una canción infantil tomo uno de sus dedos, ella intenta zafarse de mi agarre pero en la forma en que la ate se le complica. con fuerza mantengo sujeto su dedo pulgar, clavo la punta de mi cuchillo y lo entierro en medio de su uña separando la lentamente de su dedo. Siento como su cuerpo se tensa del dolor, pero ella no grita somo muerde su labio para contenerse, sin embargo sus ojos me miran con temor y eso me exista. continuo se parando la uña hasta separarla por completo dejo su dedo y ella suspira con alivio.
Pero no le dura mucho ya que continuo ese proceso con sus otros dedos. En el dedo anular logro traspasar hasta su hueso ya que ella se movió abrupta mente.
-¿No es divertido esto?-
-PÚDRETE.-
-JAA, risa sarcástica, para no mostrar que me heriste.-
Comienzo cortar sus dedos separando los de su mano, observo su cara que hasta ahora se mantiene bajo control pero sus mejillas estaba bañadas en lagrimas. Rasgo su ropa dejándola semi desnuda ante mi, comienzo a hacerle diferentes cortes en su cuerpo, provocando que suelte perturbadores y hermosos gritos que provocan que me existen.
Esta noche me voy a manosear.
Solo por impulso encajo el cuchillo en su rodilla y después la obligo a doblarla dislocando así el hueso y de la forma mas infantil comienzo a jugar con su pierna de un lado a otro riendo como un retrasado.
Las imágenes de lo que ella provoco a Artemis o a Esme, con mas furia clavo el cuchillo con mas fuerza en su pierna haciéndolo girar, ella grita a todo pulmón haciendo que yo suelte una fuerte carcajada.
Cansado de escuchar sus gritos, meto el cuchillo en su boca cortando su lengua, sin querer corto su mejilla haciendo parte de mi sonrisa. Hago otro corte, haciendo desaparecer parte de sus mejillas y labios.
- Ni el mismísimo Jeff the killer te querría.- dije riéndome.- Y eso lo se perfectamente, porque soy yo.- estallo en una carcajada.
-Lamento que el sexo salvaje que esperabas tener con migo se haya ido a la mierda porque ahora no podrás nunca mas disfrutar del contacto de otro cuerpo.- dije y me miro atenta con terror emanando de sus ojos.
Comienzo a cercenar sus pechos dejándola plana.
La observo atentamente mirando mi obra de arte, la maldita puta se esta muriendo por la perdida de sangre. así que le inyecto una dosis de adrenalina, para mantenerla con vida. Viendo como sus ojos se tornan brillantes la desato, ella cae en el piso e intenta arrastrarse lejos de mi, pero no se la voy a dejar facil.
Me coloco a horcajadas sobre ella y comienzo a apuñalarla una y otra ves, desfigurando su cuerpo dejando solo una masa sin vida debajo mio.
Una ves que termino, de descargar toda mi ira, me levanto y me voy a mi casa.
Al llegar me encuentro con Artemis, masacrando a uno de mis mascotas trofeo, con odio y desesperación.
-HEY HEY pequeña, detente ya esta muerto.- digo abrazándola y tirándola para atrás haciendo que ambos nos caigamos al piso, y ella quede de espaldas a mi entre mis piernas, mientras llora y grita con odio y desesperación.
-Suéltame,¡¡ SUÉLTAME MALDITA SEAS!!.- grita con desesperación
Sin que yo lo vea venir, ella gira y me apuñala fracasando en el intento, el filo del cuchillo rosa mi ojo pero corta un importante mechón de mi largo y chamuscado cabello.
-¿¡¡QUE DEMONIOS TE PASA!!?.- dije retrocediendo
-VETE CON ELLA, SE QUE LA AMAS A ELLA, SIEMPRE FUI UN MALDITO JUEGO PARA TI.- grita tratando de apuñalarme. y yo esquivando todos sus ataques.
Cuando choque la pared teme su muñeca, haciendo que suelte el cuchillo. Pero al instante ella comienza a golpearme con los puños.
-Artemis, detente, ¿que tienes?.- digo abrazándola para que deje de golpearme.
-SIEMPRE JUGASTES CON MIGO, JEFF, NADA DE ESO LO HICISTE PORQUE ME QUERÍAS.-
-¿que?-
-Dime que me quieres, si puedo alejarme de ti aunque sea con la frente en alto.-
-Por dios Artemis, te amo, todo esto es real, no se de que hablas.-
-Nina dijo.-
-Nunca dejes que otro asesino que no sea yo se meta en tu mente, todo o que dijo es falso.-
-Ya no se que creer.-
-Cree que te amo, solo eso.-
-Por cuanto tiempo, hasta que venga una chica que te guste, que sea mas linda que yo.-
-Para siempre te voy a amar, ninguna chica me va a gustar como lo haces tu, y nadie es mas linda que tu.-
-¿como se que no mientes?-
- porque cabe de asesinar a Nina, y tienes que darte cuenta de que cada ves que te derrumbas o que dudas de algo o de mi del porque te amo, siempre esto a tu lado sosteniéndote ara que no choques con el piso. Te amo maldición, no hay mas verdad que eso. Deja de escuchar cosas acerca de nosotros, no dejes que se metan en tu mente.-
-Osea que me amas y lo que dijo nina es falso.-
-Si, tu eres mía, si tu te derrumbas yo iré contigo.- dije besándola.
Se me seco el cerebro, perdonen por el final tan mierda, capas que haga un final alternativo.
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Jeff The Killer [Borrador]
FanfictionArtemis no tuvo una vida ejemplar toda su vida la paso en un sótano ,arreglándolas para vivir con lo poco que tenia y que le daban, con dos monstruos que la obligaban a prostituirse sin elección de escape. Hasta que crean o no un asesino frió y desp...