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No podía sacar la vista del espantoso uniforme que tenía puesto, pero lamentablemente por más que lo detestara no había nada que pudiera hacer para cambiarlo. Nunca había sido el tipo de chica que usa polleras,no porque no me gustaran,sino por el simple hecho de que no creo que me favorezcan;además de que siempre estoy más cómoda en pantalónes.

Sin dale más vueltas dejé de mirarme al espejo,me puse los zapatos del uniforme,acordonados y con un poco de tacón, y me fui a desayunar con los chicos. Sólo rezaba que todo el rollo del uniforme no fuera algún tipo de fetiche griego retorcido. 

Andrés estaba haciendo panqueques en honor a mi primer día, que estaban deliciosos. Ese simple detalle alcanzó para arreglar la mayor parte de mi mal humor y no pude evitar abrazarlo como una garrapata por un buen rato. Lave rápidamente los platos mientras ellos terminaban de juntar sus cosas y ponerse el uniforme, así salimos todos juntos hacia el aulario.

Se veían pequeños grupos de chicos y chicas de diferentes edades,todos entre risas y bromas, confluyendo en las pequeñas escaleras que hacían de entrada al edificio de clases. El edificio era digno de cualquier universidad mayor del mundo,con ese aire a sabiduría del siglo pasado, techos altísimos haciendo luego con vitrales y pisos en mosaico,era todo simplemente magnífico. Solté un suspiro al entra y sentir como lentamente las miradas se posaban en mi,algunas un poco tímidas pero otras casi hasta con descaro. Pero lo que si era común a todas ellas era la curiosidad. Levanté la cabeza bien alta y dirigí mi mirada al frente, lo que menos podía hacer en mi primer día era dejarme intimidar,por nada ni por nadie. 

Por suerte tenía mi primer clase, estrategia, junto con Diego y Enzo, quien al sentir todas las miradas había pasado su brazo por mis hombros casualmente,pero como marcando levemente territorio. Ese simple gesto me sacó una sonrisa y me dio aún más fuerza para seguir adelante con la mañana, si algo llegaba a pasar mal tenía 4 musculosos hermanos a los que sabía que podía acudir. Nos acercamos al salón discutiendo sobre películas hasta que llegó Selena en una corrida y me envolvió en un abrazo. Cuando logre separarme de ella me presentó a una amiga que había venido con ella.

- Hola, soy Luz - me dijo la chica muy sonriente mientras estiraba una mano. Luz era pequeñita, de manera menuda, muy bien propocionada,el tipo de chica que daban ganas de abrazarla, que los chicos cargaban con facilidad pero sin dejar de ser sexy. Tenía pelo negro azabache largo y tan lacio que parecía terciopelo, una cara suave de piel apenas bronceada. Pestañas oscuras e imposiblemente largas adornaban unos enormes ojos color azules, haciendo luego con unos labios levemente rosados en forma de corazón. Toda ella era simplemente hermosa e irradiaba seguridad.Curiosamente en ella el maldito uniforme parecía un diseño de calidad y resaltaba si era posible aún más su belleza. - soy hija de Afrodita. 

- Un gusto.- le contesté apretando su mano y sonriendo- hija de Ares. 

- Lo sé, Sele ya me estuvo hablando de ti-me dijo con una risa. 

- Sólo un poco- contestó ésta- Luz es como una hermana para mi,fue mi primer amiga al llegar aquí y va a venir con nosotras el viernes así que pensé que podían empezar a conocerse más. 

- Si quieren todas pueden ir a conocerse más en nuestro apartamento - intervino Enzo moviendo sugerentemente las cejas. 

- Sigue soñando Z,es un buen intento- contestó Sele tras lo cuál entró al salón moviendo las caderas de forma seductora,casi pude ver la baba cayendo de la boca de mi hermanito. 

Mientras los demás se dedicaron a saludar a las otras personas que ya se encontraban en el salón, yo pase con una sonrisa me busque un lugar vacío junto a la ventana y saqué mis cosas para ponerme a garabatear en una hoja. Por mi primer día prefería mantenerme un poco al margen y observar,aunque no pude tener demasiado tiempo de observación antes de que un pequeño grupo de tres chicas se acercaran y rodearan mi escritorio. 

En el amor y la guerra, todo se valeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora