—Olivia perdón, ya sé que es lo que más has escuchado de mi boca desde que llegué pero es lo que siento.
—Elliot, creo que... ya fue suficiente de lo mismo. Somos adultos. Podemos llevarnos bien —le aseguró ella.
—Lo sé. Quiero hacer esto. Quiero que sepas lo mucho que me arrepiento de haberme ido así. Lamento también mi actitud al llegar. No sé qué me pasó. Fui un cretino —dijo apenado. "O si sé pero cómo decirle que estaba celoso porque ella y el imbécil de Tucker están juntos" pensó—. Ese día en la cafetería no terminamos de hablar o bueno eso sentí yo...
—Vamos a tratar de empezar de nuevo ¿sí? Hacemos un buen equipo. Somos buenos en nuestro trabajo.
Elliot se perdía en su mirada, en su sonrisa, su aroma lo transportaba a un lugar mágico donde sólo existían ellos. Se reprochaba el no darse cuenta lo que sentía por ella mucho antes.
—Sé que somos buenos en nuestro trabajo. Lo demostramos con Stefanny pero quiero también que seamos tan buenos amigos como antes —tomó su mano y ella se estremeció por el contacto. Obviamente no quería ser sólo su amigo pero tenía que empezar por algo—. Sé que no tengo derecho a pedirte nada después de mi actitud de los últimos 6 años. ¡Si! me puedo ganar el premio al idiota del siglo —se apresuró a decir y Liv sonrió por el último comentario.
—No digas eso o me molestaré en serio contigo. Todos cometemos errores.
—Si pero yo ya excedí el límite contigo y quiero arreglarlo. Permíteme hacerlo —pidió con voz suplicante, ella asintió. Siguieron comiendo, riendo y hablando de cualquier cosa.
Elliot estaba ansioso por preguntarle sobre su hijo, su nueva familia. Había estado averiguando y no se había casado pero no estaba seguro si su hijo era de Tucker o si vivían juntos. No iba a andar por toda la estación preguntando sobre la vida amorosa de la Teniente.
—Tu hijo es muy lindo y te ves muy bien de madre —se animó a decir, cuando a Olivia le tocaban el tema "Noah" se le iluminaba el rostro.
—Muchas gracias. Él es mi todo... Por cierto tengo que ir a verlo. Lucy ya tiene que irse y son las 10:30 pm —comprobó la hora en su celular y verificar si no había algún mensaje—. Lucy es la niñera de Noah.
"Bien eso quiere decir que no vive con Tucker" pensó él. Su mente trabajaba a mil por segundo. —Te llevo a tu casa —ofreció Elliot con una sonrisa, ella no estaba segura de aceptar y se negó al principio pero él logro convencerla.
En el auto Liv iba dando las indicaciones de donde vivía ahora. Se sorprendió al ver que era cerca de su departamento.
—¿Me creerías si te digo que es una coincidencia pero alquilé a 3 calles de aquí? —preguntó estacionándose frente al edificio de ella.
—¿Qué? ¿Hablas en serio?
—Sí, es espacioso. Mis hijos pueden visitarme el fin de semana. Queda cerca del trabajo y lo encontré a buen precio.
Ella no sabía si invitarlo a pasar para tomar algo en agradecimiento por traerla. Antes iba a su departamento siempre. Por otro lado él rogaba que lo invitara a pasar.
"Si me invita es porque en realidad vive sola" pensó él cruzando los dedos.
—Ven, te invito a tomar algo —dijo ella por fin bajándose del auto.
Ya en el departamento, Olivia despidió a Lucy y le presentó a Elliot como un "amigo" del trabajo, "por lo menos no me presentó como un compañero del trabajo" se dijo él dándose ánimo. Ella estaba realmente nerviosa. Había pasado tanto tiempo desde que habían estado así, tan cercanos. Liv se disculpó para ir a acostar a Noah. Elliot también le había dado las buenas noches al niño y al parecer le había caído bien.
—Es muy amplio y lindo tu departamento —comentó al verla salir de la habitación de su hijo. Ya había visto todas las fotos que tenía como decoración y en ninguna había un "papá" lo cual le daba esperanza, claro que primero tenía que desaparecer a Tucker.
—¿Café, agua, cerveza, jugo?
—Veo que tengo variedad para escoger —bromeó—. Jugo está bien, gracias.
—Tuve que cambiarme de departamento y éste me pareció perfecto por la luz que entra —comentó recordando por qué se tuvo que cambiar. Quiso sacar esos pensamientos de su mente "no es el momento de pensar en Lewis" se dijo—. Un niño lo cambia todo.
—Dímelo a mí.
—¿Cómo está tu familia Elliot? —se atrevió a preguntarle.
—¡Pues bien! Mañana vendrán a visitarme. Excepto Kathy obviamente. ¿Sabes? Ya salió el divorcio —Quería hacerle saber que estaba bien con su divorcio y que estaba libre, libre del todo para ella pero había un problema ella no lo era o eso parecía. Ella no sabía cómo responder a eso último hasta se podría decir que la puso nerviosa la noticia.
—Estás tranquilo y eso es bueno ¿no? Más si se llevan bien por tus hijos.
—Sí, claro que sí. Nuestra relación mejoró. Por cierto los chicos quieren verte —indicó. Quería decirle para salir a almorzar y al parque mañana pero no estaba seguro si aceptaría.
—A mí también me encantaría verlos en algún momento. Será algo extraño, ya no son unos niños.
—Los invito mañana... a ti y a Noah —se animó a decir por fin—. Creo que le caí bien y ellos quieren verte y estoy seguro que Noah quedará encantado con ellos y viceversa.
Esperaba una respuesta afirmativa pero ella no sabía que decirle. No se esperaba esa invitación. Recién estaban sintiéndose cómodos alrededor del otro.
—Elliot no sé.
—Vamos. Te aseguro que la pasaremos bien. Iremos al parque y luego a almorzar. A mis hijos le encantará la idea —suplicó.
Olivia quería decirle que no pero veía tanta esperanza en sus ojos. Esos ojos color cielo que nunca olvidó y pensó "¿por qué no? Quizás sea bueno para reconstruir nuestra amistad". Aceptó y ambos se regalaron la mejor de las sonrisas. Elliot estaba feliz de poder acercarse de nuevo a ella. Además ella solía llevarse bien con sus hijos y ayudaría a que existiera más confianza entre ellos, como antes.
Liv miraba a Elliot de una manera especial y aunque aún permanecía decepcionada del tiempo en que la dejó sola uno de sus principales intereses era volver a confiar el uno en el otro, volver a tener esa relación de amistad que tenían. Elliot por su parte seguía culpándose por haberse ido tan dramáticamente pero estaba feliz porque ella volvía a confiar en él, le estaba costando pero iba a conseguirlo y el trabajo iba a unirlos aún más.
—Li... Olivia —dijo Elliot mirando el reloj. Era más de media noche. Aún no estaba seguro si ella aceptaría que él la llamara de esa forma de nuevo, como lo había hecho por más de 12 años. Se atrevió a hacerlo hace unas horas porque ella lo trató como antes pero seguía inseguro.
—Liv está bien.
"Si sigue mirándome y sonriendo de esa forma no me aguantaré más las ganas de besarla. Dios es tan hermosa. Esto debió pasar hace tanto" pensó Elliot. —Tengo que irme. Agradezco que me hayas recibido en tu casa. Espero verte mañana en el parque con Noah. Seguramente a mis hijos les agradará.
Se levantó del sofá. Olivia lo acompañó a la puerta para despedirlo él tenía necesidad de sentir otra vez que los envuelva la calidez de un abrazo pero no quería incomodarla, no sabían cómo despedirse pero él no quería un simple "hasta mañana" así que se acercó un poco para darle un beso en la mejilla. Ambos cerraron los ojos. Se sentía tan bien el contacto y no podían dejar de sonreír. Hubieran querido que sea eterno ese momento, aunque ella no sabía que le pasaba con Elliot solo que estaba feliz por tenerlo nuevamente en su vida.
—Hasta mañana —susurró al cerrar la puerta, tenía una sonrisa que no se le quitaría por nada del mundo.
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No olviden dejarnos sus comentarios, esperamos que les guste.Sweet & Coffee ♡ (elliotandolivialove)
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Reencuentros amorosos
FanfictionOlivia, madre y mujer trabajadora, comprometida con su trabajo, nunca imaginó que su vida cambiaría por el regreso de su antiguo compañero. Elliot, ha experimentado tantos cambios en su vida desde que salió de Víctimas Especiales y lo único que dese...