Capítulo 71

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Elliot y Olivia siguieron conversando unos minutos más sobre todo y nada a la vez. 

—Liv, es mejor ir a la cama —dijo cuando la escuchó bostezar.

—Creo que ahora si te tomo la palabra. Mañana será un largo día.

Tomó su mano y la llevó a la habitación.

—Yo cuidaré a Noah esta noche.

—Ell, tú vas a trabajar mañana, yo no. Duermo un par de horas y yo lo cuido.

—No, nada de eso. Necesitas descansar si mañana vas a cuidar de él —dijo firme y sin opción a un acuerdo—. Buenas noches cariño. Te amo —besó su frente.

—También te amo —respondió abrazándolo. 

Minutos después se quedó profundamente dormida. Elliot se levantó cada hora para vigilar a Noah y que todo estuviera bien con él. Una hora antes que el despertador sonara, Liv ya estaba despierta. Había descansado lo suficiente para recuperar sus fuerzas. Aún era temprano por lo que decidió levantarse en silencio así le daba tiempo a Elliot para que descansara un poco más. Decidió darse un baño para luego poder preparar el desayuno de los amores de su vida. Olivia fue a la habitación de Noah apenas salió de su habitación, lo vio dormir plácidamente y agradeció al cielo que no hubiera sido nada grave su accidente. 

"Ni siquiera me puedo imaginar una vida sin mí Noah. Es la luz de mis ojos, es mi todo. Lo amo y daría mi vida por él" pensó sonriendo en el marco de su puerta.

Elliot despertó segundos antes que se activara la alarma al sentir un vacío a su lado en la cama. Amaba sentir los brazos de Liv rodeando su cuerpo mientras dormía y más aún amaba verla dormir. Se levantó y sonó la alarma por fin, 7 de la mañana y empezaba un nuevo día para ellos. Salió en busca de Olivia y la contempló unos segundos antes de acercarse a ella. 

—Te ves hermosa —la abrazó por detrás—. Buen día.

—Buen día Ell —saludó con una amplia sonrisa y volteó su cara para poder besarlo—. Y no deberías mentir tan temprano.

—No miento —rió—. Eres la más hermosa mujer que pueda existir en el mundo —besó su cuello.

—Bien, vamos a creerte. Tú no te ves nada mal para estar recién levantado eh —sonrió, en realidad era que le encantaba ver a Elliot así—. ¿Desayunas y luego te das una ducha o primero la ducha y luego desayunas?

—La segunda opción me va más. Regreso en unos minutos.

Besó su mejilla y salió directo al baño.

Minutos después Noah salió de su habitación restregándose sus ojitos.  

—Mami. Papi.

—Hola cielo, buen día —saludó y se puso a su altura para besar su frente—. ¿Dormiste bien?

—Si mami. Buenos días —respondió con una gran sonrisa que mataba a Liv de la ternura—. Estas muy linda —añadió tomando su cara con sus manitos.

—Gracias. Veo que te levantaste igual de galán y halagador que tu padre.

—¿Yo qué hice?

—Buenos días papi —saludó Noah estirando sus brazos para que él lo alzara y así abrazarlo.

—Buen día campeón. ¿Qué tal dormiste?

—Bien papi.

—¿Qué hice?

—¿Le has enseñado a Noah a halagarme sólo a mi o a todas las mujeres? —preguntó alzando una ceja.

—Mami está linda ¿verdad papi?

Reencuentros amorososDonde viven las historias. Descúbrelo ahora