Capítulo 33

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Ya llevaban dos días de investigaciones y habían dado con el nombre de la víctima del hospital, Angelien Groen. Había venido en un intercambio desde una universidad en Ámsterdam y tenía más o menos un mes en el país. Nadie sabía con quien se relacionaba pero todos decían que era una relación tóxica. Luego de una semana que pisara New York empezó a aparecer con golpes en su rostro que cubría con maquillaje y a alejarse de los pocos amigos que había hecho cuando llegó al país. Los detectives sólo pudieron dar con un nombre para el supuesto novio, Javier y era latino. 

—¿Saben cuántos hombres con ese nombre hay en toda la policía? —preguntó Rollins frustrada ya que obviamente no era muy buen comienzo.

—Podemos descartar oficiales de tránsito y novatos... centrémonos en detectives —sugirió Marcus, era muy buen detective y sabía trabajar en equipo.

—Buena idea Marcus, detectives de nombre Javier entre los 25 y 35 años —dijo Olivia—. Vamos Amanda.

—Me pongo en ello teniente —dijo la rubia iniciando el programa de computadora.

Luego de unos minutos Rollins obtuvo resultados. 

—Lo tengo —dijo Amanda llamando la atención de todos—. Tenemos 2 detectives llamados Javier, uno de antivicio y el otro en casos sin resolver —añadió mostrando la foto de los dos sospechosos.

—Liv, llamaron del hospital. La víctima está peor —informó Fin.

—Necesito que investiguen lo que más puedan de ellos y muestren sus fotos a los compañeros de Angelien para ver si lo reconocen —ordenó—. Elliot, ¿podrías seguir intentando contactar con la familia? —pregunto con una media sonrisa por primera vez en toda la mañana estaban haciendo contacto visual.

—Me pongo en ello.

Ella se metió nuevamente en su oficina seguida de Marcus lo cual a Elliot le cayó como una patada al hígado. 

—¿Puedo hacerte una pregunta?

—¿Por qué pienso que no es del caso? —sonrió.

—Solo quiero saber algo para continuar en el caso. Vivimos en la misma ciudad y es increíble que no hubiéramos salido más, en plan de amigos claro.

—Ya sabes que al tener un hijo cambian un poco tus prioridades.

—Lo sé, lo sé. Por cierto, tienes que presentarme al pequeño Noah un día de estos —pidió mientras se sentaba.

—Lo haré pero dudo que esa fuera la pregunta. Pregunta ya Marcus.

—Stabler —dijo y ella se tensó, se suponía que muy pocas personas sabían de su relación y él lo había notado en poco tiempo—. Veo que no le agrado.

—¿Desde cuándo te importa no agradarle a alguien? —preguntó tratando de evadir el tema.

—Desde nunca pero creo que no le agrado por ti.

—¿Por mí?

—Sabes de lo que hablo, ¿no le dijiste que solo éramos amigos? —preguntó entrecerrando los ojos.

—Deja de mirarme como si me estuvieras interrogando. ¿Quieres saber si tenemos algo? Pues si.

—Lo sabía, ahora sí puedo seguir trabajando.

—¿Cómo supiste?

—Aparte de las miradas asesinas y su hostilidad hacia mi fueron sus miradas hacia ti.

Salió de su oficina y ella se quedo sonriendo como una tonta enamorada.

—Liv, los padres estarán aquí hoy en la tarde —dijo Elliot ingresando a la oficina de Olivia y ella alzó su mano para que esperara a que ella terminara de hablar por teléfono.

Reencuentros amorososDonde viven las historias. Descúbrelo ahora