Olivia, madre y mujer trabajadora, comprometida con su trabajo, nunca imaginó que su vida cambiaría por el regreso de su antiguo compañero. Elliot, ha experimentado tantos cambios en su vida desde que salió de Víctimas Especiales y lo único que dese...
Recordar es vivir. Así que recuerden estás maravillosas escenas. 😭😭😭❤❤❤
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Sweet ♡
** .
—Sé que no debí meterme en los problemas de tu familia pero no podía quedarme ahí viendo simplemente... tu madre me pidió que guardara el secreto pero ahora que la volví a ver hablamos y dijo que era tiempo que lo supieras —se sentó en la cama.
—¿Viajaste hasta aquí solo para convencer a mi madre y te enseñó el álbum de fotos? —preguntó y ella asintió, ya Olivia no sabía si era enojo lo que él estaba sintiendo, caminaba de un lugar a otro y la estaba mareando más.
—Sí y sí —respondió ella algo nerviosa, no tenía una buena actitud durante el juicio de Kathleen hace tantos años, no quería que al recordarlo y por su intromisión exista una pelea entre ellos—. Supongo que le caí bien. Quería que conociera un poco más de tu infancia. Ell, no te enojes. Sé que no debí hacerlo —pidió.
Él tomó su mano, la hizo levantar de la cama donde se había sentado y la abrazó muy fuerte.
—No sabes cuánto te amo y lo feliz que me hace estar a tu lado... Gracias por ayudar a mi hija y gracias por soportarme en los peores momentos de mi vida. Siempre estuviste ahí.
—¿No estás enojado?
—¿Cómo podría? —respiró profundo—. Liv, eres lo mejor que me ha pasado en la vida, incluso desde antes que reconociera que te amo.
Empezaron a besarse y acariciarse con desenfreno. Sólo habían sido dos días los que estuvieron lejos pero para ambos habían sido eternos. A pesar que Olivia no estaba tan segura de hacer el amor con él en la casa de su madre, con sus hijos y ella ahí, se estaba dejando llevar.
—Ell... tu madre y los chicos están aquí —dijo con la voz entrecortada, apenas podía concentrarse en lo que quería decir con él tocándola y besándola.
—Lo sé pero te amo y no puedo dejar de hacer esto —devoró sus labios nuevamente.
Comenzó a acariciar lentamente su cuerpo aún con la ropa puesta, aparentemente sin prisa. Amaba acariciarla, tocarla, perderse en su cuerpo. Soltó un gemido al sentir como él besaba su cuello y sonrió de forma pícara. Se recostaron en la cama, él encima de ella.
