Capítulo 114

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Al día siguiente el ánimo de Olivia no cambió demasiado a favor de Elliot, fue todo lo contrario, estaba mucho más enojada que la noche anterior, Elliot había hecho todo lo que había quedado con ella que no haría y de paso no le contestó las llamadas que le había hecho. Se limitó a hablarle esa mañana en casa y cuando llegaron a la oficina estuvo igual de cortante.

En el caso seguían igual de perdidos que el día anterior. La víctima recordaba cosas y luego desmentía otras así que ya no sabían qué creer, ni por dónde continuar. No era la mejor de sus víctimas pero lo que si estaban seguros era que habían abusado de ella.

—Hola —saludó Amanda luego de tocar la puerta de la oficina de su Teniente.

—Amanda...—se quitó los lentes y dejó a un lado los papeles que revisaba—. ¿Algo nuevo del caso? —preguntó creyendo que estaba para eso en su oficina.

—No. Estamos igual que ayer.

—¿Entonces? 

—Vengo para ver como estabas.

Liv resopló, odiaba que la creyeran tan frágil. Tomó sus lentes y volvió a centrar su mirada en sus papeles.

—Estoy bien.

—Estas molesta —afirmó la rubia.

—No —contestó seria y Amanda se sentó frente a ella con una mirada inquisitiva—. Quiero matarla... y a Elliot. ¿Sabes a qué hora llegó ayer?

—El caso...

—Sí. Lo dijo. Si no me engañó ya con ella, lo hará muy pronto —soltó y se alejó bruscamente de su escritorio—. ¡Auch! —se quejó y puso sus manos en su barriga para acariciarla, había sentido un nuevo tirón en ella—. Estamos bien —aseguró antes que Amanda se levantara de donde estaba.

—Estamos hablando de Elliot Stabler... no haría eso —dijo convencida de la fidelidad del que se había convertido en su amigo.

—Su camisa olía a su perfume.

—Liv...

—La quiero fuera de mi unidad. ¿Cree que no me doy cuenta de las miradas que le da a Elliot? 

—Creo que no sabía que ustedes estaban juntos hasta ayer —comentó recordando la cara desencajada de Dani al ver a Elliot, Liv y Noah, juntos.

—Ya le quedó bastante claro y no parece interesarle —respiró profundo y vio la hora en su celular—. Tengo que irme ahora o llegaré tarde a mi reunión con Dodds. Si hay algo más del caso me informas —pidió y tomó unas carpetas que había sobre su escritorio. 

—Mientras ustedes están fuera intentaré averiguar más de la señora que ayudó a nuestra víctima a llegar al hospital.

—¿Ustedes? No, iré sola —contestó segura, no había hablado con Elliot pero era muy obvio que no iría con él—. Elliot se quedará resolviendo el caso con su nueva compañera.

—¿Y Noah? ¿Quién irá por él?

—Yo —tomó su cartera y sus cosas—. A partir de hoy sólo vendré hasta esta hora y luego pasaré por Noah.

—Te llevo yo, entonces...

Amanda insistió tanto en llevarla con Dodds y esperarla para luego ir por Noah que Olivia no se pudo negar. Salieron de la oficina de la Teniente y Amanda movió la cabeza en forma negativa al ver a Elliot, tomó sus cosas y le dijo a Olivia que la esperaba fuera. Elliot no entendió nada. Se acercó a ella con toda la intención de decirle que exageraba pero su mirada lo hizo pensárselo dos veces. Allan había sido claro, nada de peleas, cero estrés, etc y una pelea en medio de la unidad no iba a ser bueno para ella y para los bebés.

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