Change me:: mg

Capítulo|51:

Martijn

Apenas faltaban minutos para llegar al hospital y ver a Alana,me moría por abrazarla ya que no me imagino como debe estar.

—Llegamos señor.—el chofer del uber habló,le pague la carrera y entré para buscar él piso.

—Buenos días señor,¿en qué podemos ayudarlo?—una enfermara sonrió.

—Estoy buscando la habitación de Edmon Hale.—hablé.

—Esta en él piso siete habitación número 539.—sonrío.

—Gracias.—asentí.

Fui hasta él ascensor y subí hasta él quinto piso,cuando llegué fui buscando las habitaciones por número,divise a un hombre alto y este tenía abrazado a Alana,no ni uno de sus hermanos, la sangre me empezó a hervir.

—Siento interrumpir.—hablé carraspeando la garganta.

—¿Martijn? ¿qué haces aquí?—preguntó Alana separándose del tipo.

—Vine a verte y a ver como estabas,pero no me necesitas por lo visto.—miré mal al tipo,este se cruzo de brazos y río.

—¿El es tú novio Alana?—preguntó.

—Ex.

—Bienvenido al club.—golpeo mi hombro,era su maldito ex estaba abrazando a su maldito ex novio.

—No estoy en ningún club mucho menos contigo.—lo miré mal.

—¿Puedes dejar de ser grosero?—Alana habló.

—Okay yo no quiero causar problemas,iré por algo de comer. ¿El café de siempre miel?—preguntó sonriendo.

—Cafe con cr...

—Café con crema de vainilla.—le guiñó él ojo.

—Sí.

Se marchó dejándonos solos,estaba hirviendo de los celos ahora resulta que la conoce como ella misma.

—Mientras que uno viene a verte y apoyarte ella feliz de la vida con su ex.—me cruce de brazos.

—No quiero ser grosera pero...¿te pedí que vinieras Martijn?—también se cruzo de brazos.

—Tenía que estar a tu lado en está situación Ala...—me interrumpió.

—En vez de estar cuidando a Molly y a tu hija.—habló.

—Tu eres la que me importa.—exclamé.

—Sí por eso me trataste mal él otro día y me dijiste todo lo que no quería escuchar mientras que lo único que quería era apoyarte y ayudarte y sobre todo sobrellevar la relación.—dijo irritada.

—Estaba Molly... Jodiendo mi paciencia y por eso te trate mal.—solté furioso.

—¿Tanto que ayer la llevaste a comer y pasaron tiempo en familia?—me miró,suspire botando toda la molestia y no armar un escandalo en pleno hospital.

—Creí que ibas apoyarme en esto.—respondí.

—Y quiero hacerlo maldición pero no puedo si no me dices la verdad y me tratas como si fuera una desconocida diciéndome que no me meta en tus jodidos asuntos cuando en realidad lo único que quiero es a y u d a r t e,¿qué mas quieres Martijn?—habló al borde del llanto,se tapó él rostro y se dio la vuelta dándome la espalda.

—Ey no no.—la tomé del brazo,no quería verla llorar por mi culpa.

—Solo quiero que seas honesto conmigo.—pidió.