[2] •Jimin, I miss u... || 윤민 (Yoonmin)

°047°

Llevó sus manos hacia sus pómulos, los cuales inconscientemente estaban húmedos. Sentado con su capucha puesta y su cubrebocas para no ser reconocido.

—Lo siento, Joven, no quiero entrometerme... — habló la mujer —, pero si estás pasando por momentos difíciles deberías platicar con alguien y no quedarse en silencio... — aconsejó — Tiene sus sentimientos consumiendo cada parte de usted — suspiró — ¿Necesita ayuda en algo? — negó — ¿Quiere platicar? — negó nuevamente — De acuerdo — dejó un pastelito en la mesa — Espero logre animarse. La vida aún sigue, puede salir adelante por sí mismo... — sonrió animada, dejándolo completamente solo, atendiendo a las personas de sus alrededores.

«—¿Dónde estás Jimin?» se preguntaban los seis chicos, esperando encontrarlo.

—Hola — saludó con una sonrisa y ordenó su café favorito más algo de comida de la cafetería que siempre visitaban antes de seguir con su viaje en busca de Jimin.

Esperaba encontrarlo o tendría que avisar una vez más que no estaba en ningún lado y eso definitivamente sería un gran problema para todos.

Lo que menos querían era que la Agencia se enterara.

Giró a su derecha y juntó sus cejas confuso al ver al chico encapuchado sentado en los últimos asientos de la cafetería.

—Ese chico a estado llorando desde hace unas horas — hizo un mohín — Usted me recuerda mucho a una celebridad, pero quizás me equivoco — sonrió — Que lo disfrute — entregó el café y aperitivos.

Se acercó a la mesa del chico que según la mujer había estado llorando. Al acercarse más y más, sonrió victorioso. Había encontrado a Jimin. Sin embargo, su sonrisa desapareció y antes de siquiera llamar a los demás, decidió hablar con él.

—Hyung — se detuvo frente a Jimin — Lo hemos estado buscando por todos lados...

—No deberías estar aquí, Jungkook — murmuró — Deberías decirles que vuelvan a casa y me dejen en paz.

—Todos están muy preocupados — murmuró — ¿Qué es lo qué pasa? — preguntó preocupado, sacando las manos del mayor del rostro — ¿Por qué ha estado llorando tanto, Hyung? — no hubo respuestas, sólo llantos que aumentaban cada vez más — ¿Es por lo de Taehyung o por... Yoongi-hyung?

No hubo respuestas y Jung Kook sintió tristeza. Jimin se veía tan destrozado, tan deplorable, que sintió querer llorar con él por el simple hecho de que sus lágrimas daban a entender lo dañado que estaba. Su corazón parecía estar completamente roto.

Sólo optó por sentarse a su lado y abrazarlo mientras acariciaba con una mano su espalda y con la otra su cabello. Sabía que Jimin lo necesitaba, todos habían estado criticando sus actuares sin comprenderlo en absoluto.

Ese era el menor del grupo, siempre preocupado de sus mayores, aunque sea el chico con menor edad entre ellos estaba ahí para apoyar y animarlos.

—No lo entiendo — lloró — Todo lo que hago está mal — murmuró — Me siento un idiota. Una persona realmente inservible y sin talento ¿Por qué no puedo tener tu voz o la de Jin-hyung?

—Hyung, deberías apreciar más lo que eres...

—Eso trato, pero no lo logro. Hice que Taehyung y yo pasaramos de ser amigos a enemigos. Hice que Yoongi-hyung terminara con la relación y de amor pasó a una gran desgracia. Nadie lo entiende, estoy harto de que no comprendan mis emociones. Saben que mi relación con Yoongi siempre fue importante y ahora sólo... — no terminó la oración, sólo soltó sus sollozos — Todo este tiempo me he preguntado el por qué terminó conmigo — se aferró al menor — Por qué lo hizo si todo estaba yendo bien entre nosotros — sorbio su nariz una vez más — La única respuesta aquí siempre he sido yo, pero... ¿qué hice mal realmente, Jungkookie? Todos estos años ¿qué hice mal? — volvió a cuestionarse.

Había tratado de todo, cada plan, cada pequeño gesto o acción. Tenía las esperanzas de que todo funcionaría, pero ya todo era nulo, ya nada era lo mismo y debía lidiar con su realidad.

¿Por qué tener el corazón en mil pedazos destrozaba su alma?