[2] •Jimin, I miss u... || 윤민 (Yoonmin)

°067°

Se miró en el espejo mientras arreglaba su vestuario y sonrió levemente frente a éste.

La puerta se abrió, por lo que miró por el reflejo de quien se trataba. Yoongi y Namjoon se hicieron presente, mirándolo con confusión y cierta curiosidad.

—¿Dónde vas, Jiminie? — Namjoon preguntó con una sonrisa al verlo ser tan pretencioso.

—Saldré con uno de los bailarines — sonrió — Los chicos no quisieron salir está vez — murmuró — Así que iré con Yeol. Él me acompañará a dar un paseo por la feria de artesanía y presentará un poco la ciudad...

—¿Conoces a ese chico? — Yoongi preguntó tratando de hacerse el desinteresado.

—Si, hablamos en las prácticas. Es amigable

—Amigable. — dijo en voz baja con incredulidad, sólo para que Jimin no lo oyera — Confías demasiado — volvió a murmurar. Sin embargo, Namjoon lo miró y sonrió, tenía una idea y sabía perfectamente que si lo hacía Jin quizás dejaría de estar molesto con él al haber hablado con la chica que una vez saboteó su relación.

—¿Por qué no vas con ellos, hyung? — Namjoon ofreció hacia Yoongi.

—¿Por qué no vas tú? — Yoongi contra atacó.

—No tengo ánimos de salir, Jin está molesto conmigo e iré con él — hizo un mohín.

—No te preocupes, hyung, puedo ir solo. Yeol estará ahí — sonrió terminando de arreglar su cabello. Yoongi lo miró desde su lugar ¿por qué debía de arreglarse tanto? Respingo su nariz y apartó su mirada, seguramente era una cita. Namjoon soltó una risa al verlo tan irritado y celoso.

—El manager hyung no querrá que Jimin salga solo — murmuró hacia Yoongi para luego cruzarse de brazos mientras tenía su mirada en Jimin — Supongo que tendremos que dejar que vaya con el nuevo bailarín aunque no confiemos en él — volvió a murmurar — Sería malo si algo le pasara... — suspiró para luego sonreír — Debo irme. Nos vemos, ten una buena noche, Jiminie — se despidió del menor para luego mirar a Yoongi y volver a sonreírle. 

Salió de la habitación y el teléfono de Jimin comenzó a sonar, por lo que el menor respondió de inmediato mientras Yoongi, está vez, terminaba de ordenar su maleta.

—Me iré, hyung, nos vemos luego — Jimin se despidió. Yoongi cerró sus ojos y soltó un suspiro de resignación.

—Espera — cerró la maleta. Sacó su abrigo y salió de la habitación junto al pelirrubio.

—¿Qué hace?

—Iremos a pasear con tu amigable amigo — respondió con ambas manos en sus bolsillos. Jimin sonrió.

Min Yoongi era un caso muy particular y especial para él. Aún le gustaba... mucho.