[2] •Jimin, I miss u... || 윤민 (Yoonmin)

°032: 💔°

Yoongi no volvía y estaba aterrado. Había pasado por esto antes, en una de sus discusiones cuando Jae volvió, pero ahora, no lo soportaba. Era su culpa, siempre todo era su culpa.

La puerta se abrió repentinamente, dejando ver a Yoongi en ella. Jimin con tan sólo mirarlo sintió que había pasado una eternidad desde que había salido de casa, pero la verdad era que sólo llevaba unas horas afuera.

Se levantó con sus lágrimas aún siendo derramadas y lo abrazó, pasó sus brazos por su torso para así ser abrazado por Yoongi hasta que sus lágrimas disminuyeran. Los cinco chicos se sintieron aliviados por primera vez al ver a Yoongi junto a Jimin, sí, Min Yoongi normalmente los fastidiaba cada vez que protegía a Jimin de toda la maldad que existía, pero ahora era diferente.

—Lo siento mucho — susurró — Lamento lo que hice, lamento todo lo que dije con anterioridad. Sé que actúe mal — murmuró — No debí de haberlo hecho, pero prometo que no volverá a pasar — sorbio su nariz — Sólo... no vuelvas a irte así otra vez, hyung — pidió — Te amo...

Se apartó de él observando detenidamente sus ojos un poco rojos por las lágrimas, tragó fuerte, tratando de ser valiente, pero su pecho se comprimió. Llevó sus pulgares a las mejillas del menor limpiando las lágrimas que aún caían. Detestaba verlo llorar, pero debía ser fuerte y mantener la compostura.

—Está bien — dejó un beso en ambos pómulos — No es tu culpa, Jimin.

El castaño lo miró con confusión.

¿Jimin?

¿Por qué oír su nombre salir de los labios de su novio era tan extraño y frío? ¿Por qué sentía que algo no estaba bien? ¿por qué lo miraba con nostalgia y cierta seriedad?

—Ocurre algo más ¿cierto?

Los cinco chicos, quiénes comían, jugaban o simplemente oía la conversación, prestaron una absolutamente atención en la pareja.

—Nosotros... — soltó las manos de Jimin y retrocedió, quedando a una distancia prudente — No podemos continuar, Jimin.

Jin se ahogó con su bebida hasta tal punto que Namjoon tuvo que guiarlo a la cocina para que se calmara un poco.

—¿De qué hablas...?

—Jimin ¿te has puesto a pensar en la complejidad de nuestra relación? ¿en el rumbo que todo está tomando? — se quedó estático al oírlo, ¿él estaba..? — Creo que lo mejor es acabar con lo nuestro.

—Lo dices por lo que ocurrió ¿no? — sus ojos se aguaron nuevamente — Hyung, sabes que...

—Jimin, lo digo por nosotros — interrumpió sus palabras — Por ti, por mí, por nuestro tiempo — suspiró — Nuestra relación no está bien, necesitamos tiempo y espacio. Creo que es la única forma para saber lo que realmente queremos en nuestras vidas, lo que deseamos demostrar y lo que es bueno para cada uno.

—No soy bueno para ti ¿verdad? — su voz se entre cortó, haciendo presente sus lágrimas.

—Jimin, eres perfecto para mí — lo miró con mucha sinceridad — Simplemente... — los ojos avellanas del menor brillaban con tanta nostalgia, tanta tristeza a causa de las lágrimas que... No podía. Maldición ¿por qué debía ser tan difícil dar la libertad necesaria para que se centrará en lo que realmente vale la pena? — Debemos darle un tiempo a nuestra relación, es todo.

—¿Por qué...? — Jimin era el único chico, luego de su madre, que lo conocían bien. Sin embargo, aún no podía hablar sobre el verdadero motivo para todo esto.

—Creo que somos maduros como para entender lo que es acabar una relación y darnos el tiempo que necesitamos — para saber quiénes somos realmente. Se dijo a sí mismo. — Creo que debemos buscar y encontrar nuestro propio camino... — ver si se cruzan y nos unimos una vez más, conociéndonos, sabiendo quiénes somos para amarnos con la misma intensidad. Concluyó a sus adentros, sin ser capaz de decir cada una de esas palabras frente al menor, quien ya estallaba en eternas lágrimas.

Dicho aquello, caminó a la salida del hogar cerrando la puerta detrás de él, sin decir más.

Jimin sintió como su corazón se rompió lentamente en millones de pedazos, como su pecho subía y bajaba por las infinitas lágrimas que se adueñaban de su rostro. Se sentó en el sofá mirando hacia la puerta, donde Yoongi del otro lado no podía creer que realmente lo había hecho, dejó de estar apoyado en la puerta y siguió su camino soltando sus lágrimas de igual modo.

Todo había acabado entre ellos, absolutamente... todo.

Jin y Taehyung lo abrazaron mientras los otro tres chicos trataban de reconfortarlo con sus palabras. Empero, no hubo caso alguno, Jimin se levantó del sofá yendo hacia la habitación queriendo estar solo y procesar todo lo que había pasado encerrado en su cuarto.

Este era el fin de su relación y estaba aterrado de lo que pasaría de ahora en adelante con él.

Ambos habían saltado sus manos para seguir caminos separados.