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Jimin se acercó para ayudar

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Jimin se acercó para ayudar. Abrieron las cajas con comida para así comenzar a comer en silencio, dedicándose sólo miradas. Jimin extendió de su comida hacia Yoongi, quién la recibió con gusto, para luego el mayor limpiar la comisura de los labios de su chico. Ciertamente, la costumbre permanecía, siempre hacían ese tipo de cosas cuando estaban juntos y sus amigos cada que podían los molestaban diciendo que parecían una verdadera pareja de casados.

Ambos se dedicaban miradas más que palabras.

—Por cierto — sacó la tarjeta de su bolsillo — Puedes volver a tu habitación — deslizó está por sobre la mesa. Jimin sólo miró la tarjeta por unos segundos y continuó con su comida — El manager dijo que todo está habilitado — ignoró sus palabras — ¿Qué pasa?

—¿Qué dirías si digo que... quiero seguir compartiendo la habitación contigo?

—Te diría que puedes, pero que debemos volver a nuestras habitaciones de todos modos.

—¿Por qué? Sólo podemos quedarnos aquí y ya...

—Podemos, pero no busco tener problemas con el personal — acercó el paño a la comisura de los labios del pelirrubio, limpiando éstos una vez más.

—Está bien... — continuó con su comida, accediendo aunque no lo quisiera — ¿Podemos quedarnos juntos al menos está noche?

—Podemos — sonrió al oír su respuesta.

—¿Y la próxima noche? — apoyó sus manos en sus mejillas, dándole una linda y tierna apariencia.

—No lo sé — respondió con una sonrisa al ver su, ahora, puchero.

—Si hago la misma pregunta mañana ¿qué dirías? — mordió levemente su labio, queriendo oír su respuesta. Su estómago se revolvió completamente y sus ojos brillaban tan preciosos.

—Lo pensaré — musitó. Jimin se levantó de su lugar y caminó a él con un nuevo puchero. Se sentó en sus piernas y abrazó su cuello.

—¿Por favor? — lo miró con ternura — Nadie debe saberlo — susurró — Y si lo saben, les diremos que sólo queda una semana. Es estúpido volver a las habitaciones... — apoyó su mentón en su hombro, comenzando a dar caricias en su cabello, bajando a su nuca con delicadeza y suavidad — Amor — quedó a centímetros de su rostro con un puchero — Yoonie — movió sus pestañas lindamente, logrando que el mayor soltara una risa y lo abrazara.

—Supongo que no habrá problema, después de todo sólo quedan tres días para volver a casa... — decidió. Jimin sonrió ampliamente y lo abrazó fuertemente con cariño.

—Te amo, te amo, te amo — dejó reiterados besos en sus mejillas.

—Está bien, ahora deberías acabar tu comida o la comeré por ti

—No — se bajó de sus piernas y volvió a su respectivo lugar, comiendo con tranquilidad luego de conseguir lo que quería — ¿Estás bien con volver a casa en tres días? — preguntó curioso — Digo, los conciertos y el extranjero son lindos también...

—Lo son, pero tengo cosas pendientes en Seúl — asintió comprensivo — ¿No quieres volver a casa?

—Puedo ver a mis amigos — respondió — Y estar contigo — sonrió — Eso está bien para mí  — Yoongi asintió, dejando su comida por unos segundos para observar a su pequeño feliz. Bajó la mirada y relamió sus labios sintiendo su pecho oprimiendo sus entrañas.

¿En qué demonios se había metido y por qué arrastraba a su lindo chico a sus problemas..?

[2] •Jimin, I miss u... || 윤민 (Yoonmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora