Lo sabía

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POV Poché

Nunca me imaginé este momento, nunca me imaginé que hacer el amor con la persona que amaba fuera de esta forma.

Daniela había sido tan delicada, tan cuidadosa, tan preocupada y tan perfecta en todo momento que simplemente me olvidé de mis inseguridades, del dolor que estaba sintiendo en un principio.

Me olvidé de absolutamente todo lo externo, solo éramos ella y yo, solo me enfoqué en ella, en su cuerpo en sus toques, en sus caricias y dios...

Calle tenía un gran talento oculto con esa lengua.

Yo también había dado mi mayor esfuerzo en hacerle sentir igual o mayor placer del que ella me había hecho sentir y al parecer había superado sus expectativas.

Nuestras espaldas hechas mierda, hablaban por si solas.

Me sentía agotada, completamente exhausta. No habíamos dormido casi nada, literalmente pero yo ya llevaba despierta un buen rato.

Calle seguía durmiendo abrazada a mi cuerpo, seguía con esa respiración tranquila sin ninguna preocupación, sin nada que le quitara el sueño.

Era la chica más hermosa de toda la galaxia.

Mis dedos acariciaban su espalda desnuda una y otra vez, mis ojos recorrían la mitad de su cuerpo al descubierto sin pudor alguno.

Daniela Calle había terminado con mi cordura la noche anterior.

Poco a poco comenzó a moverse, estaba a punto de despertar. Gruñó apretando sus ojitos hinchados, abrió lentamente uno de sus ojos y después abrió el otro con cierta dificultad.

─Buenos días novia.─dije todavía con voz ronquita.

─Ushhh.─se quejó intentando moverse, al parecer le dolía el cuerpo.─Buenos días amor, ¿Qué hora es?─me saludó con voz más ronca tallándose los ojos con los puños.

─Es medio día.─contesté a la ligera. Calle bufó y volvió a cerrar los ojos.─¿Estás cansada? ¿Quieres seguir durmiendo?─pregunté preocupada por el sueño de mi novia.

─Estoy más que agotada amor.─respondió extendiendo los brazos.─Ayer exprimiste literalmente todas mis energías para el día de hoy.─entendí aquella referencia.─Me duele todo.─

─Estoy igual que tu bebé.─contesté abrazándola esta vez yo por el torso.─Desearía pasar todo el día así arruchada junto a ti.─apreté más mi agarre.

─A mí también me encantaría y mucho, pero estoy segura que teniéndote así desnuda frente a mi es mucha tentación para mis hormonas.─reí ante su confesión, me separé de ella y decidí a levantarme confundiéndola un poco.─Además tengo sesión de fotos con el trofeo, más entrevistas y esas bobadas en dos horas exactamente, por lo que mi tiempo está medido amor.─rodeé los ojos por todas esas bobadas.

─Buuu, aguafiestas.─me quejé dejando caer la sabana que me cubría en el suelo.─Yo quería tomar una ducha contigo, no se...─meneé mi trasero.─Ya sabes...─mordí mi labio. Calle tenía la mirada perdida en mi cuerpo.

─Poché...─comenzó a regañarme sin dejar de mirarme.

─¿Qué amor? Solo voy al baño.─respondí aproximándome a la puerta.─La dejaré así abierta porque...No me gusta cerrar las puertas de los baños.─dejé tal cual abierta dicha puerta, sabía que Calle no soportaría tal presión.

─Mierda, te odio amor.─casi gritó en la habitación, pude escuchar sus pisadas aproximándose al cuarto de baño. La regadera ya estaba abierta, prácticamente solo estaba esperando a que saliera el agua caliente para meterme pero Daniela se me adelantó y apretó una de mis nalgas.─Y me odio por no poderme resistir a esas lindas nalgas que veo frente a mi.─esas fueron sus últimas palabras antes de arrojarme a la ducha ya caliente, encendiéndome un poco más...

EL ARTE DE AMARTE (CACHÉ)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora