EL ARTE DE AMARTE (CACHÉ)

¿Qué iba a pasar?

POV Calle

Entré a mi hogar sigilosa, tratando de hacer el menor ruido posible.

Mi cuerpo temblaba con cada paso que daba. El hormigueo en todo mi cuerpo lleno de miedo y adrenalina invadía todo mi ser.

El corazón se me aceleraba, tenía inmensas ganas de huir, de salir corriendo de vuelta con Johann y Pau pero ya no había vuelta atrás.

Pude ver a mi padre frustrado, agarrándose la cabeza lleno de enojo caminando de un lado para otro por todo el centro de la sala, Juliana estaba sentada, solo mantenía el periódico en sus manos.

Entré un poco más todavía sintiéndome la hormiga más pequeña del mundo frente a ellos, sintiendo ese mismo miedo que sentía cada que hacia una travesura a mis seis años de edad o incluso sintiendo ese miedo que nunca antes había sentido en mi vida.

En un impulso de querer hablar, caminé nuevamente hacia ellos y justo al momento de dar el paso, mi padre levantó la cabeza. Se quedó helado, se quedó sin respiración. Juliana hizo lo mismo cuanto notó que papá se había detenido.

─Papá, hermana.─hablé con voz temblorosa. Mi rostro estaba hecho más que un asco y mi maquillaje peor aún.

─Dany.─mi hermana me llamó levantando el trasero del sofá.─¿Qué...Qué significa esto?─se dirigió hacia mi con voz serena. Juliana estaba más tranquila que papá, solo corrían por su rostro un par de lágrimas.

─Cierra la boca Juliana.─papá calló de inmediato a la mayor de sus hijas. Tragué saliva al escuchar a mi padre en un tono tan serio y fuerte que nunca antes había escuchado.

─Yo puedo explicarlo todo papá.─traté de decir mientras me acercaba más a ellos quienes estaban paralizados, quietos y estáticos.

─¿¡Explicar que Daniela!?─nuevamente la voz estruendosa de mi padre me hizo temblar de pies a cabeza-─¿¡Qué te gustan las mujeres!?─sentí esas palabras como cuchillas en el corazón.─Eso ya está bastante claro aquí en el periódico, en las televisoras, en todo el mundo por dios. La familia Calle está en boca de todos.─le quitó el periódico de las manos a mi hermana y me la mostro con detenimiento.

─No quería que nada de esto pasara, no quería que nada de esto saliera publico.─intenté explicar.─Papá, Poché y yo nos amamos, Poché y yo estamos enamoradas, ¿Qué no lo ves? ¿Por qué es tan difícil de entender eso?─pregunté un tanto ilógica.

El amor no se debía esconder.

El amor de chico con chica estaba bien.

¿Por qué el amor entre personas del mismo sexo era tan mal visto por los padres y la sociedad en general?

─¡Tú no estás enamorada! ¡Tú no amas a esa maldita chica!─papá pegó un grito desde la boca del estómago.─¡A ti te gustan los hombres, nada más que los hombres!─me señaló amenazante dando un paso más a mi. Juliana lo detuvo de un brazo.

─¡No!─me defendí usando el mismo tono que él.─¡A mí solo me gusta una chica y se llama María José!─

─¡Cierra la boca Daniela!─siguió con sus gritos rápidamente, cada vez sus oídos soportaban menos mis palabras, estaba segura.─¡Cierra la boca antes que...─se detuvo un momento cuando se dio cuenta de lo que iba a decir. Giró la cara y se agarró la mandíbula.

Las venas de las manos y la frente de German resaltaban mucho más que antes. Su rostro estaba rojo del enojo y su mandíbula apretada.

─¿¡Antes que qué papá!?─lo enfrenté obligándolo a completar.─¿¡Antes de que me vuelvas a pegar como hace unos años!?─se giró hacia mi nuevamente.─¡Hazlo!─di un paso más casi chocando mi cuerpo con el suyo.─¡Me importa una mierda lo que hagas! Nada de eso cambiará lo que yo siento por ella, nada de eso cambiara que...─no alcancé a terminar de decir.