Red Dragon

Cap. 33

El capítulo comienza con Hiro hablando con Light.

Light le dice asombrado -no puedo creer que puedas usar más de un tipo de flama-.

Hiro le responde aun meditando -bueno.... nunca preguntaste, y ¿por qué es tan raro?-.

Light le responde mirándolo -entre los stigmas de fuego se nace preparado para dominar un solo tipo de flama, el simple hecho de poder usar 2 es algo muy poco común, necesitas un manejo de stigma increíble-.

Hiro menciona -bueno yo no nací preparado pero creo que mi cuerpo esta acostumbrado al tipo de trato que dan todos los tipos de flamas, o bueno eso me decía mi maestro cuando me entrenar hasta quedarme sin aliento- .

Light le dice con un tono compasivo -eso suena a un infierno-.

Hiro le responde con una sonrisa -la verdad no era tan malo, la comida era buena y mi maestro era mas agradable de lo que parecería a simple vista, por cierto ¿me dirías de que trata la misión en Israld?-.

Light le pregunta extrañado -¿para qué?.

Hiro para de meditar y le responde -bueno, nos levaras gratis a Israld lo menos que puedo hacer es darte una mano

Light le comienza a explicar  -bueno, si tu lo dices. Al parecer han desaparecido varias personas, no hay rastros, ni nada que nos diga que haya sido un animal salvaje, así que probablemente-.

Hiro menciona antes de que termine -sea un vampiro o un demonio-.

Light menciona alegre -exacto, al llegar haremos una investigación y en caso de ser un demonio los mataremos-.

Hiro le pregunta -¿y si es un vampiro?-.

Light le responde enrollando la hoja de la misión -dejaremos que el gobierno mundial se haga cargo de encarcelarlo.

Hiro pregunta extrañado -¿que crees que haya pasado?.

Light le responde -¿con las personas', quizá estén muertas, aun así espero contar contigo, Hiro, ve  por tu futón antes de que Takeo se lo quede.

Mientras tanto Minerva Fue hacías una habitación donde estaban Yukkiro y Kaede.

Minerva les dice a ambos -hable con el capitán, dijo que llegaremos en 2 días-.

Kaede le responde -ya veo, gracias-.

Minerva menciona amablemente -haré algo de café, ¿quieren?.

Kaede algo apenada le dice -no quisiéramos molestar...-.

Yukkiro le dice antes de que Kaede termine de hablar -yo si quiero--.

Minerva le responde -de acuerdo, vuelvo enseguida-.

Kaede salio del cuarto y fue a la popa del barco, donde vio a Hiro.

Kaede le dice -ya deberías dormir-.

Hiro dice algo enojado -Takeo se quedó el ultimo futón que quedaba-.

Kaede le menciona apiadándose de él -que pena, puedo darte una almohada y una cobija si quieres-.

Hiro le responde -se que no me las darás, bueno ya que estas aquí, quería darte esto- y saca una bolsa de su abrigo.

Kaede le pregunta -¿y eso?-.

Hiro le responde -es la mitad de mi parte de la recompensa, aun no olvido que destruí tu casa, soy alguien de palabra y pienso pagártela-.

Kaede sonríe y seguido de esto se ríe un poco  -dices eso y aun te faltan los muebles la ropa, utensilios y un montón de cosas mas-.

Hiro la mira sorprendido.

Kaede aun tiene una pequeña sonrisa y le pregunta ¿pasa algo?

Hiro el también sonríe y responde -deberías mostrar esa sonrisa mas seguido, te ves mejor así que con ese semblante serio de siempre-.

Kaede deja de sonreír y le dice -quizá lo haga-.

Hiro le menciona -bueno vete a dormir y despierta tarde tarde si quieres vamos a tardar 2 días en llegar-.

Kaede en un tono burlón le dice -pues descansa en el piso de madera-.

Al día siguiente, en Israld vemos a Hikari en la misma biblioteca leyendo un par de libros con una sonrisa pegada en su rostro.

Hikari cierra un libro y dice -creo que ya es hora de devolverlos a los estantes-.

Empezó a ubicar cada libro en su respectivo sitio, de repente al ubicar uno, se detuvo a ver otro que estaba al lado.

Hikari lee la portada en voz alta -magia de golems-.

Entonces extendió su brazo pero se detuvo.

Hikari sonríe de forma melancólica y dice -no, no va a servir de nada..

Comenzó a subir una escalera para ubicar un libro arriba, de repente alguien abrió la puerta de golpe y del susto Hikari se cayo, mientras los libros le caían encima también.

Era Slader quien había abierto la puerta.

Hikari le pregunta gritándole -¿PODRÍA TOCAR LA PUERTA?-.

Slader le responde con otra pregunta -¿hoy también faltaras?-.

Hikari cansada le dice -¿no podría dejar que me gradúe sin pasar esa clase?, tengo notas perfectas en las demás clases-.

Slader le responde -esa no es mi decisión-.

Hikari le refuta -si lo es-.

Slader algo enojado le pregunta -¿crees que Irenne estaría contenta de ver que tan rápido tiras la toalla?-.

Hikari le responde también enojada -no la vuelva a mencionar, por favor-.

Slader le responde algo mas calmado -yo también te pediré de favor que reconsideres hacer el examen este año, que tengas un buen día-.

Hikari se arrodilló y empezó a recoger los libros del piso sonriente.

De repente al ver de nuevo el libro sobre golems a su cabeza vino un pequeño recuerdo de ella más joven frente a una chica con el cabello del mismo color que ella y con sus ojos de su mismo color, pero esta parecía ser mayor.

La chica mayor hizo lo que parecía ser un pequeño muñeco de barro, y puso una mano encima de él, empezó a salir un brillo de esta mientras Hikari veía asombrada, el muñeco empezó a moverse y caminar.

Hikari le dice asombrada -¡wow!, increíble hermana-.

La chica orgullosa le responde -hmmm, soy una maestra cuando de golems se trata-.

Hikari burlándose le dice -aunque dejas mucho que desear en las demás clases-.

La sonrisa orgullosa de la chica desapareció y tenía una cara de decepción.

La chica le dice -pero aún así tu eres muy buena en lo demás, menos en la magia de golems-.

Hikari: si, tienes razón, supongo que me da igual ser buena o no, si te tengo a ti nos contrarrestaremos muy bien y seguido de esto sonríe.

La chica menciona -¿ya te dije lo tanto que me gusta verte sonreír? *empieza a acariciar su cabeza*, puede que papá y mamá no estén, Hikari, pero yo siempre estaré ahí para ti, sin importar que, porque somos...-

Volvemos al presente y Hikari sonriendo pero con lágrimas en sus ojos dice -hermanas-.

Fin del capítulo 33