Star Wars: Padme's Adventures (2)

Capítulo 10

La castaña se encontraba parada en frente de la ventana para ver esa vista que tanto le gustaba cuando se iba a sus misiones. Eso la tranquilizaba y la ayudaba a pensar claramente. Empezó jugar con sus manos cuando escucho la puerta abrirse. Volteo emocionada, pero se dio cuenta que solo se trataba de su droide. Aunque no se sentía lista para hablar con Poe Dameron.

- Creí que eras...- soltó un suspiro de frustración-. No importa quién creí que fuera- BB-8 hizo ruidos de tristeza, haciendo enternecer a la princesa-. No es tu culpa- Son cosas normales. No todo puede ser perfecto y los seres vivos cometemos muchos errores. 

Padme se quedo pensativa. Tal vez hablar con Aayla le ayudaría a tener otra perspectiva de la situación y que le daría una salida que ella no estaría tomando en cuenta.

- Quiero hablar con Aayla- dijo finalmente Padme.

La figura de Aayla apareció en el instante. La chica se secó las lágrimas que aún se encontraban en sus mejillas. Aayla sintió pena por lo que estuviese ocurriendo. 

- Padme, ¿estás bien?

- Creo que la respuesta ya lo sabes. Y se que te enojaría se te contestaría que estoy bien.

- ¿Qué fue lo que paso?

- Poe y yo peleamos.

La chica tuvo que contar lo sucedido en la batalla, las acciones que había tomado Poe sin el consentimiento de Leia y la discusión que habían tenido en el puente sin importarles que todos los presentes escucharan.

-  Yo no quiero más héroes en mi vida-dio un suspiro-. Yo solamente quiero a mi esposo vivo. Sé que no puedo retener a Poe todo el tiempo porque hacemos misiones y, prácticamente, es nuestro trabajo. Yo... solo quiero que nada malo le pase- sintió como un nudo se empezaba a formar en su gargarnta.

- Creo que deberías de hablar con él lo que me acabas de decir y disculparte-fue lo único que se le ocurrió decirle a su amiga.

- No creo que se pueda en estos momentos, Aayla- su amiga la miro sorprendida-. Él no me quiere hablar. Hasta cierto punto lo herí con mis palabras y no me quiere ver.

- Padme, deben de arreglar esto lo más pronto posible. Si alguno de los dos muere, el otro se lo pasará lamentando por el resto de sus días.

- Lo haré mañana- Padme se quito las lágrimas que comenzaban a azomarse nuevamente.

- Hazlo hoy, de preferencia. Porque nunca sabrás si habrá un mañana en la situación en la que nos encontramos.

- Trataré.

- De preferencia hazlo hoy- la regaño-. Tengo que irme, hay muchas casas por hacer aquí- Aayla se quedo en silencio por algunos segundos-. Y trata de relajarte, que no le hará nada bien a mis sobrinos.

- Lo tomaré en cuenta- cruzo sus brazos-. Tú también trata de descansar. Fue un día difícil para todos en la Resistencia.

El holograma de Aayla desapareció ante sus ojos, dejando a la princesa sola. Se sento nuevamente en la cama, tocándose su vientre. Tenía que buscar a Poe, pero tenía que dejar que los ánimos en él bajarán también. 

Padme se acostó en el colchón, haciendo que quedará dormida en el instante. Nada ni nadie haría que la chica despartará hasta que sus energías fueran renovadas.

Padme caminaba lentamente en prado que le recordaba la vegetación de las Lunas de Endor. Sus pies descalzos hacía lo mucho que extrañaba aquella agradable sensación. Se detuvo cuando una sonrisa infantil se escucho a sus espaldas. 

La chica se dio media vuelta para encontrarse con una niña de cabellos negros y enrulados que trataba de acercarse a Padme con pasos rápidos y torpes. A cada paso que daba, veía algo nuevo de la niña. Las facciones parecidas a las de Poe y los ojos azules que tanto habían caracterizado a los Skywalker.

- Mamá-balbuceo la pequeña extendiendo sus pequeños brazos a la castaña-. Mamá.

- Shara- carga a su hija mientras esta se recargaba en su pecho-. Mi pequeña Shara, te pareces tanto a tu padre.

- Mamá-la pequeña se empezó a mover inquietamente-. Mamá.

Padme bajo a su hija, no sin antes, depositarle un beso en su sien. Shara agarro la mano de la princesa, guiándola por el prado lo más rápido que sus piernas se lo permitían. La niña se detuvo en cuanto escucharon una segunda risa, haciendo que Shara observará de manera traviesa a su progenitora.

Poe se acercaba a ellas con un niño entre sus brazos. Padme se dio cuenta que el pequeño tenía el cabello castaño y liso, los ojos oscuros y una combinación de sus facciones con las de Poe. Padme se acerco maravillada a su hijo.

- Han- le acaricio el rostro e intercambio su mirada hacia los dos mellizo-. Después de todo si los tendré.

- Mamá-balbuceó Han en los brazos de Poe-. Mamá.

- Tranquilo, mi amor. No permitiré que nada malo les pase. Lo prometo.

Padme abrió los ojos cuando sintió una presencia cerca de su vientre. Bajo su mirada lentamente para encontrarse a Poe hablando con sus hijos de manera pensativa. Si algo no le negaría en la vida sería separarlo de sus hijas. Él fue el primero en recibir emocionado la noticia, a pesar de que Padme se había sentido aterrada cuando le dieron los resultados.

- ... Por eso no se preocupen cuando nos peleamos- la voz de Poe era lo único que se escuchaba en el cuarto-. sería tan irreal no hacerlo, pero es algo que es normal cuando tienes diferencias con las personas cercanas-el piloto dio un suspiro-. Pero eso no es lo que quería decirles. Lo que les quiero decir es que ahora, ustedes son mi razón para vivir. Si mamá no está orgullosa, quiero que ustedes lo estén.

Padme reprimió sus ganas de levantarse y abrazar a su esposo. Pensó en la posibilidad de sería mejor para otra ocasión, cuando todo se hubiera arreglado para ellos. Mientras tanto, le haría creer que se encontraba dormida, haciendo que se cambiará lentamente de posición.

Padme sintió como se hundía la cama a su lado. La chica se dio me vuelta para encontrarse que Poe le estaba dando la espalda. Sentía frío esa noche y no le pediría un abrazo, porque ese abrazo sería más frío de lo que le gustaría pensar.

La castaña miro el techo para pensar claramente lo que tendría que hacer el día siguiente para hablar con su esposo. Está vez no tenía a su amiga cerca para aminorar las cosas y no siempre la tendría. Ella también tenía que solucionar sus problemas maritales.