𝐁𝐑𝐎𝐊𝐄𝐍 𝐒𝐎𝐔𝐋𝐒¹ •| |• 𝐁𝐈𝐋𝐋𝐘 𝐇𝐀𝐑𝐆𝐑𝐎𝐕𝐄 ✓✓

CAPÍTULO DIEZ - I

DINNER INVITATION
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Después de despedir a los Hargrove e ingresar a casa.

— Prepararé la cena en un rato y hablaremos después de comer. — anuncia la mujer castaña.

— De acuerdo. — murmura — Voy a dejar mis cosas. — señala en dirección a la zona del pasillo.

— Claro, cielo. — mostrando una delicada sonrisa — Hablaré con Bob para ver si me puede hacer el favor de llevarme mañana temprano y cambiar el neumático. — informa caminando hacia el teléfono.

Fëanor asiente y se avanza por el pasillo hasta su habitación con Jonathan pero ve la puerta abierta de la habitación de Will. Así que se detiene para pasar a verlo.

— Hey, — saluda recargada en el marco de la puerta y este voltea hacia ella — ¿Qué dibujas?

— Nada interesante. — responde negando y dejando de lado su libreta de dibujo. Con honestidad no había tenido mucha inspiración últimamente. — ¿Dónde estabas? No te vi en toda la tarde. — menciona curioso.

— Estaba con Steve. — Will la mira esperando que continúe — Tuve un mal día y fui a su casa.

Asiente y comenta. — Creí que estarías con Jonathan ya que tampoco ha llegado. Incluso escuché un auto hace rato pero era la madre de Max y su hermano.

— Sí, los vi cuando llegué. — afirma con obviedad — Oye, ¿no tienes frío? — interrogó al verlo bien.

— Ah, no. — se mira a sí mismo y sube la mirada — No tengo frío. — niega seguro.

— ¿En serio? — insiste puesto que sólo llevaba una pijama muy ligera como si estuviera en verano.

Will niega nuevamente. Estando alerta su huésped para no ser descubierto ante las sospechas.

Ivers no pudo continuar con la conversación porque la puerta principal se escucha y pronto se visualiza a mayor de los hermanos Byers ingresar.

— ¿Es Jonathan? — cuestionó el pequeño al percibir el sonido de la entrada.

— Sí, lo es. — responde mirándolo de reojo.

Jonathan llega a ellos después de pasar por explicar a su madre donde estaba.

— Hey, amigo. — saluda a su hermano y él le sonríe de vuelta — Ah, — se enfoca en la azabache — ¿podemos hablar? — dice en voz baja cerca de su oído.

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Ambos ingresan al cuarto y mientras la pelinegra cierra la puerta, Jonathan se sienta en la silla junto al escritorio.

— ¿Qué sucedió? — interroga cruzada de brazos.

El castaño suspiró profundamente. — Tenemos la grabación. — alude mirándola a la cara.

Fëanor se queda sin habla al escuchar las palabras de su amigo.

¿Lo lograron?

— Logramos que nos metieran a las instalaciones del laboratorio hasta llevarnos con el Dr. Owens. — explica lo sucedido — Hicimos que hablara de la culpabilidad con la muerte de Barbara… — dejando a entender el rumbo de la situación.

Ivers suspira cubriendo su boca con una de sus manos tratando de analizar toda la información.

Habían logrado introducirse al laboratorio y consiguieron una declaración sobre lo que buscaban. Y lo que la alivia es ver que los dejaron ir.