𝐁𝐑𝐎𝐊𝐄𝐍 𝐒𝐎𝐔𝐋𝐒¹ •| |• 𝐁𝐈𝐋𝐋𝐘 𝐇𝐀𝐑𝐆𝐑𝐎𝐕𝐄 ✓✓

S2 - CAPÍTULO DIEZ - II

VAIN HOPES
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El plan estaba puesto sobre la mesa y sólo había que esperar que las horas avanzaran para poder llevarlo a cabo. Una larga y ansiosa espera de descubrir la verdad. O sencillamente de asegurar lo que temían.

Fëanor y Max eran las más consternadas por el enlace y afecto que tenían con el californiano.

Así que para calmarse y hacer tiempo hasta entonces, junto con Once, y mientras los otros mantenían guardia espiando a Billy, se dirigieron a un negocio de comida. Que de hecho era de los pocos lugares que aún no había cerrado en el pueblo de Hawkins a causa del Starcourt.

— Miren, — habla la pelirroja — ahí podemos sentarnos. — señalando una mesa en un rincón. Las tres se dirigen ahí para sentarse. Las menores dando la espalda a la entrada y la mayor sola, frente a ellas.

Cuando la mesera llegó, ordenaron unas hamburguesas y papas fritas con malteada. Además de encargar algunas otras para llevar a los chicos. Nadie del grupo había ingerido algo de alimento en varias horas hasta el momento, debido a todo el problema con el azotamentes y Billy.

Ivers al estar en ese lugar, ese mismo lugar en el que el rubio y ella acostumbraban a ir a comer en ocasiones durante su relación. Ese en donde tuvo uno de los primeros encuentros en el pasado cuando todavía le parecía fastidioso.

Aún podía rememorar la imagen del rizado llegando de pronto y comportándose tan hostigante que incluso tenía ganas de incendiar su cabellera rubia que ahora tanto le gusta jugar.

¿Cómo habían avanzado tanto entre ellos desde el año pasado? Parecía imposible el hecho de que en tan poco tiempo ellos lograron ser simples compañeros de clase sin interés personal, a ser novios que compartían historias trágicas que intentaban sobrevivir día a día juntos.

Juntos.

Ya no lo estaban. Pero, ahora sabía que no era por él que la quería lejos. Eso sentía en realidad.

Billy nunca la dejaría. Él se lo prometió.

— Aquí tienen. — menciona la mesera. Saliendo de su divagación.

— Gracias. — responden las tres al unísono. Y se disponen a comer lo que pidieron.

— Está muy rica. — declara la castaña al beber su malteada de chocolate.

— Aquí preparan comida muy buena. — destaca la azabache.

— Sí, esto sabe bien. — admite la pelirroja, tras beber la suya de vainilla. — Pruébala. — insta a su amiga. Quien sonríe por el sabor al degustarla.

Prosiguen así hasta que unos minutos después, una de ellas tiene una duda desde temprano en la reunión del equipo en el sótano.

— Oye, Fëanor. — la llama Mayfield. Mientras la aludida hace un sonido para que continúe ya que sigue masticando. — Cuando tú y Will hablaban del último escalofrío… — murmura captando la atención de la pelinegra. — Dijiste que estuviste con un amigo esa noche. — reitera a su comentario — Creí que habías ido a casa. — argumenta frunciendo el entrecejo. No tenía idea de cómo abordar el tema que traía en su cabeza.

— Sí, estuve con un amigo. — corrobora lo dicho — Me encontró en la lluvia y me llevó a su casa porque estaba empapada por la lluvia, llorando en medio de la calle. — explica lo sucedido — Fue cuando tomaba chocolate caliente que el escalofrío llegó a mi. — anuncia — Intenté volver en ese momento pero me quedé ahí a dormir para reunirme con los demás al día siguiente. — añade tranquila.