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Los tres invasores decidieron atacar a la vez, la mujer frunció el ceño dando un pisotón al frente, mostrando su cuchillo de manera amenazante. El Dios invocado hizo lo mismo, agrietado el suelo de un solo movimiento, provocando su desequilibrio a quienes vienen a llevarse a la mujer.
Osiris extendió su mano y trató de tomar a uno de los villanos, pero los tres se dispersaron.
El que tiene la capacidad de lanzar cristales, quedó a un lado del pórtico, teniendo una muy buena posición para atacar a la mujer, pero esta lo observó, demostrando su poder una vez más.
Sus ojos azules se iluminaron en un azul mas claro, con el borde de las pupilas de un tono fucsia intenso.

-Catrina.

Sin necesidad de hacerse una herida, un portal color rojo con detalles dorados como pétalos de flores se abrió frente a ella, dando paso a una mujer esquelética, un bello vestido rojo decorado con flores de cempasúchil, cabellos negros y en su cabeza un gran sombrero del mismo color de su vestido, decorado con velas y flores de todo tipo.
La deidad invocada observo la situación y fijó su amarillenta en el villano, que al estar en frente a ella, no dudó ni por un momento atacar, pensando que aquello no es nada más que criaturas débiles. Los cristales se incrustaron en el cuerpo de Catrina, ella bajó la mirada y lentamente fue quitando los cristales de su cuerpo, destruyendolos con solo un leve apretón.

- Me identifico por ser pacífica y nunca me meto en la vida de los mortales, nada más los observo hasta que su vida se consuma y vaya a mi mundo... ¿pero no estamos en mi reino, no es así?.

Ambos dioses defendieron a la mujer, ella también puso de su parte, trayendo consigo un báculo con una daga en una de las puntas. Su enemigo es Hari Kurono, que a duras penas puede escapar de las habilidades ocultas de Yumi Takahiro. La mujer dio una vuelta entera, con el arma arriba de su cabeza haciéndola girar rápidamente, para luego tomar la madera con firmeza y apuntarle con la daga directamente.

-Largo de mi hogar, asquerosos perros sarnosos! -gruñe enojada- Si no quieres que tu alma sea juzgada y enviada al más allá. 

Sus dos compañeros, tanto el pequeño y el grandote fueron lanzados cerca suyo con fuerza, escuchando los quejidos de estos.
Osiris y Catrina se colocaron a cada lado de la mujer, mirándolos fijamente, esperando el momento preciso para atacar si aquellos desconocidos hacían un movimiento en falso.

-Vete de aquí y llévate a tus débiles compatriotas. Si no quieres que estos dioses se lleven sus vidas, da media vuelta y abandona mi hogar, intruso. Aprovecha ahora que te perdono la vida.

Hari se puso de pie e hizo una leve reverencia, ella es superior a pesar de no ser héroe o líder de algo, simplemente una mujer de familia que se dedica totalmente a su hija y trabajo. Tomo a sus compañeros como pudo y comenzó a arrastrarlos, bueno, solo a uno comenzó a llevarlo de esa manera, al otro lo llevaba colgando en su hombro.

A Chisaki no le iba a gustar para nada que la mujer no esté en sus manos.

Ambos dioses se aseguraron de que aquellos tres intrusos se hayan retirado para que ahora sí, su señora pueda soltar todo el aire y esfuerzo retenido.
Respirando aliviada, cayó de rodillas y la diosa se acercó rápidamente, notando algo que la comenzó a preocupar.

-Mi señora... usted...

-Estoy bien..., no te preocupes, gracias a los dos estoy bien, y por lo menos, no volverán..., eso espero.

-Si esos mortales vuelven a aparecer, Anubis puede ser invocado por usted par-Osiris es interrumpido por su domadora-

-Anubis eligió a mi hija desde el primer momento en que la vio. Solo la obedece a ella en este mundo, yo solo soy un mortal más para él. Ni siquiera me escuchará.

⚡Zeus Daugther⚡||BokunoHero||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora