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Llegó a una sala de espera y se acercó a la mesa donde se servían varias delicias que se exponen con elegancia.
Tomó dos sándwiches y una botella de jugo para luego irse a sentar en unos lugares vacíos, empezando a degustar aquella comida tan exquisita que hacen.

Comiendo tranquilamente, observó como alguien se pone delante de ella, va subiendo la mirada y se encuentra con un muchacho alto, fornido y con una gran sonrisa acompañada de una mirada penetrante.

-¿Tu eres Chiho Takahiro, verdad? -sonrie en grande-

-Am... si, así es ¿necesitas algo?

El joven hizo una reverencia muy pero muy exagerada, haciendo chocar su frente con el suelo fuertemente. Allí la mente de Chiho dio un cortocircuito, pues no sabía que estaba pasando. ¿¡quién demonios viene a preguntar por tu nombre y luego se rompe la cabeza?!

-¡Es un placer conocerte! ¡Mi nombre es Inasa Yoarashi! -se endereza y un fino hilo de sangre se desliza por su frente-

-Ay por los dioses -se pone de pie, agarra la servilleta que tenia y comienza a limpiarle la sangre- es un placer también conocerte pero no hace falta que te revientes la frente, podría ser muy malo para ti.

-Lo siento, me emocioné mucho, conocer a la señorita que ganó el festival deportivo de la academia Yuuei, me hace saltar de la emoción. -sonrie mucho-

-Si... supongo -sonrie leve-

El joven que se presentó como Inasa tomó asiento a su lado, hablando sobre lo asombrosa que se había visto, y ella por su parte negaba y reía por la manera tan divertida que el muchacho relataba cada cosa que decía.
De lejos, sus compañeros la observan fijamente con algo de tristeza, pues todos querían de vuelta a su amiga, pero al parecer ella no los perdonaría aún.

Su conversación se interrumpió cuando algo o alguien peludo, con el mismo sombrero de la academia de Inasa se puso frente a ellos dos.

-Inasa, deja a las personas en paz.

-Lo siento! Es que cuando la vi me emocioné y no pude evitar acercarme para expresar mi admiración hacia ella!

-Pero que idiota... -susurra y luego observa a la chica, haciendo una reverencia- Un placer conocerte, señorita Takahiro, no esperábamos encontrarte por aquí. Pero que irrespetuoso soy, mi nombre es Nagamasa Mora.

-Un placer conocerlo. -sonrie leve y observa a los otros dos alumnos que se acercan-

Seiji Shishikura, un chico recto y correcto, se acerca a su delegado de clase, pero sus ojos rápidamente se posan sobre la joven semidiosa sentada frente a él.
No sabe que sucedió pero cayó de rodillas, observando a la joven que por poco y no entra en pánico al verlo caer de esa manera.

-¿Estoy muerto? Si estoy muerto... ¿eres tú, mi angel protector? -se acerca rápidamente de rodillas y toma las manos de la joven- Dime, bello angel, ¿estoy en el cielo?

-No seas idiota. -Nagamasa le da un golpe en la cabeza y lo aleja de la Semidiosa- más respeto, avergüenzas a la academia.

-L-Lo siento... -mira a Chiho- pero es que... tengo un angel frente a mi...~

Riendo nerviosa, observó a otro lado, pero no contaba que estaría siendo vista por la chica del grupo, haciendo que su corazón parara por unos instantes.
Kemy Utsushimi sonrió levemente mientras que sus grandes ojos la observan de arriba a bajo, haciendo que un escalofrío enorme se instalara en el cuerpo de la chica.

Los 5 minutos más largos de su vida fueron aquellos, pues la chica no apartaba la mirada de ella, estaba a punto de entrar a un colapso cuando el chico peludo la llamó para hablar a solas por un momento.
Haciendo una reverencia, lo acompañó hasta un extremo de la sala y allí él le entregó una tarjeta de presentación, con un número telefónico.

⚡Zeus Daugther⚡||BokunoHero||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora